El incendio forestal en la precordillera de Ñuble ha consumido más de 730 hectáreas de vegetación nativa. A pesar de su magnitud, las autoridades han descartado la declaración de alerta roja.
Incendio sigue activo, pero con mejoras
Desde el viernes pasado, el fuego ha afectado la Jungla Peumayén, un importante pulmón verde de la región. Según Conaf, la situación ha mostrado una leve mejoría en los últimos días gracias a los esfuerzos de combate.
Despliegue de recursos a máxima capacidad
El miércoles se movilizaron cuatro brigadas terrestres, dos mecanizadas y una helitransportada. Además, participaron siete helicópteros, incluyendo dos Súper Pumas, un BlackHawk y un Chinook. También se sumaron tres aviones cisterna y un avión de coordinación.
Autoridades piden alerta roja
El gobernador regional, Óscar Crisóstomo, solicitó la declaración de alerta roja debido a la importancia ecológica del área afectada. Sin embargo, Senapred y Conaf indicaron que no se cumplen los requisitos necesarios, como amenaza a viviendas o infraestructura crítica.
Evaluación y monitoreo constante
El delegado presidencial, Rodrigo García, señaló que actualmente no hay peligro para viviendas cercanas. "Existen cortafuegos, ríos y quebradas que dificultan el avance del fuego, pero seguimos monitoreando la situación", afirmó.
Los equipos de emergencia continúan trabajando intensamente para contener el incendio y evitar mayores daños en esta importante reserva natural.
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