REGIONES.- Una red de abuso sexual infantil de escalofriantes dimensiones ha sido desmantelada en Chillán, con la condena de 14 personas involucradas en una serie de delitos que se prolongaron por una década.
La víctima, una joven que hoy es adulta, sufrió abusos desde los 8 años a manos de un círculo de adultos que se aprovechó de su vulnerabilidad.
El líder de la red
El principal acusado, identificado como M.A.O.B., se ganó la confianza de la menor y su familia, incluso llegando a ser profesor particular de la víctima. Sin embargo, detrás de esa fachada se escondía un depredador sexual que orquestó una compleja red de abusos, involucrando a otras 13 personas. La Fiscalía ha solicitado la pena máxima de presidio perpetuo simple para este individuo.
Cinco sujetos fueron acusados por delitos de violaciones, abusos sexuales, almacenamiento de material pornográfico infantil y producción de material pornográfico infantil, todos los cuales tienen como víctima a una joven que sufrió estos delitos durante una década en Chillán, los que comenzaron cuando tenía 8 años de edad.
Al principal condenado, M.A.O.B, se le imputan todos los delitos anteriores que suman 14 hechos. Violó y abusó sexualmente de la víctima y, además, era quien contactaba a los otros acusados para que cometieran los actos de relevancia y significación sexual en contra de la joven.
“Este condenado llegó a la vida de la niña como profesor particular, luego fue pareja de la madre de esta y desde pequeña fue influyendo en ella para someterla a los vejámenes sexuales, desplegando acciones para hechizarla y mantener en secreto los hechos hasta incapacitarla psicológicamente para oponerse a estos”, explicó el fiscal Florentino Bobadilla.
Acotó que “precisamente la causal invocada por la Fiscalía para acreditar los delitos fue esta incapacidad psicológica de oponerse de la víctima, lo que se probó a través de evidencia pericial y testimonial”.
La joven contó con el apoyo y contención psicológica de la Unidad de Atención a Víctima y Testigos de la Fiscalía Regional.
Para M.A.O.B, la Fiscalía está solicitando el presidio perpetuo simple (a lo menos 20 años de cumplimiento efectivo antes de optar a algún beneficio) por las violaciones, otros 20 años de presidio por los abusos sexuales, otros 15 años de presidio por la producción de material pornográfico infantil, a lo que se suman 3 años de presidio por el almacenamiento de pornografía infantil.
Otros imputados son J.C.C.R y A.A.M.C., a quienes se les acusó por violaciones reiteradas y producción de material pornográfico, cada uno. Por las violaciones, la Fiscalía les pide una pena de 15 años de presidio, y por el otro delito, 5 años y un día de presidio.
A ellos se suma, M.E.I.C., a quien se le acusó por una violación y producción de material pornográfico infantil. Se le pide la pena de 8 años por la violación, y 4 años por el otro delito.
Por último, a C.E.P.F se le acusó por estupro y producción de material pornográfico infantil. La Fiscalía, le solicita al tribunal una pena de 8 años por el estupro y 4 años por el otro delito.
En esta investigación había otros 9 imputados que ya fueron condenados en procedimientos abreviados, obteniendo, para cada uno de ellos, penas de 5 años de presidio.
El jefe de la Brisex, subprefecto Iván Velásquez Medina, explicó que “esta investigación duró más de un año, y no solo con la labor de los detectives de esta brigada especializada, sino que con el apoyo constante de nuestro Laboratorio de Criminalística, considerando que se hizo un peritaje que incluyó 16.500 imágenes y más de 130 videos de connotación sexual, que permitieron establecer la identidad y responsabilidad de los acusados”.
El Tribunal Oral en lo Penal de Chillán fijó la lectura de sentencia para el próximo sábado 14 de diciembre a las 13 horas.