El reciente miércoles se vivió una triste jornada en San Ignacio con el lamentable fallecimiento de un niño de 2 años y 9 meses, quien cayó dentro de un pozo de agua cercano a un huerto de frutillas, ubicado en el kilómetro 4 de la Variante a San Ignacio. Bomberos de San Ignacio fueron avisados de la emergencia en horas de la mañana, pero no lograron rescatar al menor a tiempo.
Detalles del accidente
El comandante de Bomberos de San Ignacio, Esteban Contreras, explicó que, a pesar de llegar rápidamente al lugar en unos 10 minutos, lamentablemente el cuerpo del niño ya no era visible al llegar, ya que estaba inmerso en el agua. Procedieron a extraer el agua del pozo para realizar la búsqueda, pero fue en vano.
Investigación y declaraciones
Desde la Fiscalía Regional de Ñuble, el fiscal jefe de Bulnes, Álvaro Hermosilla Bustos, informó que, según testigos, la madre del menor llegó con él a un campo en el kilómetro 3,5 de la Ruta N-65 para labores de recolección de frutillas. El niño estaba jugando con otro menor, pero en algún momento se separaron. Fue este último niño quien alertó a los mayores sobre la emergencia. El menor fue trasladado al Centro de Salud Familiar (Cesfam) de San Ignacio, donde ingresó sin signos vitales. El cuerpo fue remitido al Servicio Médico Legal para la autopsia.
Declaraciones de la PDI
El jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI, subprefecto Raúl Sánchez, indicó que llegaron al lugar por solicitud de la Fiscalía Regional para recabar antecedentes. Confirmaron que el niño estaba acompañado de su madre y jugaba con un primo cuando accidentalmente cayó al pozo. Las personas presentes intentaron rescatarlo, pero sin éxito, por lo que dieron aviso a bomberos. Desde el Cesfam de San Ignacio señalaron que el niño ya había fallecido por asfixia por inmersión al momento de su llegada.