Se trata de internos del CET San Miguel de Ablemo de Gendarmería.
En el sector rural de San Miguel de Ablemo existe este centro carcelario donde una de las principales actividades productivas es una fábrica artesanal de longanizas, cuya producción se comercializa principalmente en San Carlos y otras ciudades del país.
Aquí la población penal vive un régimen semiabierto que se caracteriza por el cumplimiento de la condena en un medio organizado en torno a una actividad laboral y de capacitación, donde las medidas de seguridad adoptan un carácter de autodisciplina de los condenados.
Según la información solicitada por este medio, el personal destinado a esta fábrica sería cuatro internos y tres funcionarios de Gendarmería y la producción mensual sería de unos tres mil kilos de este embutido y la utilidad sería de entre un 20 a 25% sobre los costos de la materia prima, incluyendo los gastos directos e indirectos de producción.
Desde Gendarmería se aseguró que la utilidad obtenida a través de la venta de la longaniza que allí se produce, es reinvertida en la misma unidad. Esto es mediante incentivos monetarios a la totalidad de los internos del CET, mantención de maquinaria utilizada en la producción de longanizas y el pago de consumos básicos no cubiertos por el nivel regional, además de la compra de insumos de las otras áreas productivas de la unidad.
Si bien para esta pequeña fábrica de longanizas no hay proyectos inmediatos, desde Gendarmería se informó que “se realizan mejoras con fondos propios, según necesidad y visualización de un mejor servicio”.
Esta fabrica cuenta con su resolución sanitaria vigente e inicio de actividades ante el Servicio de Impuestos Internos, programas de control de plagas y las resoluciones vigentes para los vehículos utilizados en el reparto de longanizas, propios de la institución.
Un dato extraoficial es que la producción es requerida por funcionarios de otras unidades carcelarias que, atraídos por la calidad del producto, están atentos a los repartos que se realizan teniendo así un mercado cautivo.