By Mario San Martin Abril 01, 2019
En el secano de Ñuble y puntualmente en Portezuelo se ubica la Viña Lomas de Llahuen que este fin de semana inició su tradicional vendimia,
lo que convocó a un grupo de autoridades que llegaron al lugar y que fueron atendidos por el propietario de esta viña, Gustavo Riffo Fernández.
Actualmente Lomas de Llahuen tiene 20 hectáreas de viñas en producción, donde se destacan variedades como País, Cinsault y Moscatel de Alejandría, estas cepas actualmente forman parte del patrimonio vitivinícola de Chile. También trabaja con variedades finas o convencionales como son Cabernet Sauvignon, Syrah, Alicante Bouschet más conocida como tintorera y Chardonnay.
Gustavo Riffo, joven productor vitivinícola del Valle del Itata, quien aparte de poseer una larga herencia familiar en torno a la producción de vinos en la comuna de Portezuelo, destaca por el gran valor agregado que actualmente le está incorporando a su negocio, donde ha logrado complementar en perfecta armonía, el cultivo de uvas y la producción de vinos ancestrales, con el turismo rural (enoturismo), logrando así conseguir nuevas fuentes de ingresos.
El fin de semana durante los trabajos de vendimia llegaron a la viña un grupo de autoridades regionales, del agro y locales que conocieron este emprendimiento basado en una tradicional actividad del secano del Ñuble, que este vitivinicultor ha logrado diversificar al agregar a la producción de vinos, el turismo rural, sin duda un lindo ejemplo, el que se podría replicar en otras partes de nuestro Valle del Itata.