al incursionar en el mundo de la tecnología y los negocios. La decisión los tiene ahora en el ojo de la noticia luego de haber vendido una de su empresa “Cornershop” a Walmart, por 225 millones de dólares.
Pero la historia de estos jóvenes se escribe de mucho antes… primero fueron los chilenos Daniel Undurraga y Juan Pablo Cuevas, ambos ingenieros civiles de la Universidad Católica, los que se atrevieron a formar la primera empresa en el 2002 llamada Lemontech, enfocada en hacer software especializado para abogados, la cual cuenta con más de 800 clientes en más de 19 países.
Luego, se integró al grupo el sueco Oskar Hjertonsson, máster en ingeniería industrial y financiera, crearon Needish, que era una plataforma para publicar necesidades y generar una red de ayuda de servicios, pero fue un total fracaso.
Pese a esta caída, los tres amigos no bajaron los brazo, y mientras estaban en Estados Unidos buscaron financiamiento para sus nuevas ideas, se enteraron del popularidad de ‘Groupon’. Fue entonces como en el 2010 dieron el vamos a ‘Clandescuento’, el cual fue un éxito. Sólo en su primer día vendió más que todo el tiempo que llevaba Needish. Ante esta noticia, “Clandescuento” fue vendida a Groupon con la intensión de expandir su negocio a Latinoamérica.
Aunque el apetito por seguir creando no cesaba para este trío, por lo que nuevamente pusieron sus mentes a trabajar. Mientras vivían en Estados Unidos, se dieron cuenta que la gente utilizaba sus smartphones para hacer toda clase de pedidos y fue así como nació Cornershop. “Nosotros usábamos muchas de esas aplicaciones on demand cuando vivíamos en Estados Unidos. Allá se puede hacer todo desde el celular: pedir comida, pedir que te pasen a lavar la ropa, que te manden documentos por correos, o lo que sea. Hay una serie de aplicaciones con geolocalización y funcionan muy bien. Así que nos preguntamos: ¿Por qué no probamos este concepto de pedidos a domicilio en Chile?”, comentó Juan Pablo Cuevas a La Segunda en el 2015.
La nueva empresa se convirtió en todo un éxito, pues Cornershop les “facilita” la vida a sus usuarios, al tener a personas a cargo de sus pedidos, desde ir al supermercado hasta ir a la farmacia, y todo eso en un tiempo no superior a los 90 minutos.
Gracias a su popularidad, el gigante estadounidense Walmart puso los ojos en esta aplicación, que según informó, “esta incorporación fortalecerá la entrega de los pedidos en la ‘última milla’ -nombre que recibe el paso final en la cadena de distribución de un pedido online- entre 60 y 90 minutos, proporcionando una nueva y más conveniente forma de comprar”.
De este modo, fue como los tres amigos cerraron un contrato por 225 millones de dólares con Walmart… y aunque parezca ya tienen la vida solucionada, sin duda sus mentes no pararán y ya vendrán nuevas ideas.