Con la llegada del invierno, los vecinos de San Carlos ya comienzan a enfrentar los estragos que genera la neblina, transformándose en uno de los fenómenos climáticos más característicos y peligrosos de la temporada.
Para prevenir accidentes automovilísticos, Jonathan Soto, prevencionista de riesgos, explicó que “como las mañanas y noches, en ocasiones, estarán cubiertas por un manto blanco que reduce la visibilidad, es importante que los conductores de zonas urbanas y rurales conduzcan preventivamente”.
En primer lugar, el profesional de la seguridad especificó que “lo primero que hay que hacer es reducir la velocidad y aumentar la distancia con el vehículo de adelante. La visibilidad limitada impide reaccionar a tiempo ante cualquier obstáculo. A esto, se suma el uso de luces bajas y antiniebla, ya que las luces altas rebotan en las gotas de agua y empeoran la visibilidad”.
En la misma línea, el prevencionista con experiencia en faenas mineras, detalló que “es importante mantener una conducción suave, evitando frenadas repentinas o giros bruscos que puedan provocar derrapes, especialmente en caminos húmedos o con barro”.
Consultado por otros datos, el experto manifestó que “no es menor decir que se debe mantener los vidrios limpios y desempañados. En casos de visibilidad extremadamente reducida, es vital buscar un lugar seguro para detenerse, fuera de la calzada, con las luces de emergencia encendidas”.