En una jornada histórica para el fútbol de la Región de Ñuble, cientos de hinchas de Ñublense viajaron más de 400 kilómetros para presenciar la final de la Copa Chile 2024 en el estadio Nacional. El partido, que enfrentó a los Diablos Rojos contra la Universidad de Chile, dejó un sabor agridulce para los chillanejos.
¿Qué ocurrió en la final?
Ñublense salió al campo con la ilusión de levantar el trofeo y con dos modificaciones respecto a la semifinal frente a Magallanes. Manuel Rivera volvió a la titularidad y Diego Tapia, una de las figuras de la final, asumió el puesto tras las molestias de Nicola Pérez. Sin embargo, la Universidad de Chile mantuvo la posesión del balón en la primera mitad, complicando al equipo de Chillán. A pesar de tener una ocasión clara de gol en los pies de Bayron Oyarzo, los azules abrieron el marcador al minuto 37’.
Un segundo tiempo de intensidad
El segundo tiempo se desarrolló en total favor de Ñublense. Con un cambio de actitud, el equipo mostró mucha intensidad de cara al arco rival. El empate parecía inminente cuando el “Pato” Rubio definió de zurda en el área chica, desatando la locura en el sector ñublensino. Sin embargo, tras el llamado del VAR, el juez José Cabero anuló el tanto. Los Diablos Rojos siguieron buscando un gol para llevar el partido a los lanzamientos penales, pero no lograrían abrir el cerrojo azul.
Despedida con orgullo
Con el pitazo final, el panorama fue triste para la gente de Chillán. A pesar de la derrota, los hinchas se sintieron orgullosos de vivir esta exitosa época de la institución. Los Diablos Rojos no dejaron de alentar, demostrando su espíritu combativo hasta el último minuto.
Un hito para el fútbol de Ñuble
Esta final marca un hito en la historia del fútbol de la Región de Ñuble. La participación de Ñublense en la Copa Chile 2024 y su llegada a la final es un logro que quedará grabado en la memoria de los hinchas chillanejos. Aunque el resultado no fue el esperado, el equipo dejó una marca indeleble en el corazón de sus seguidores.