Científicos aconsejan controlar la población de árboles "sedientos" ante el cambio climático
El calentamiento global está alterando el equilibrio hídrico de los bosques, y un nuevo estudio de la Universidad de Carolina del Norte revela que el aumento de poblaciones de árboles "sedientos", como los arces, podría hacer que los bosques del oeste del estado sean más vulnerables a inundaciones y sequías.
Impacto del cambio climático en los bosques
Los arces, que tienen poros difusos, requieren más agua para crecer que los robles, que tienen poros anulares. Esto significa que los bosques con más arces tendrán una mayor pérdida de agua y menor escorrentía, magnificando los efectos de la sequía. Katherine Martin, profesora asistente de recursos forestales y ambientales en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, explicó que esta dinámica afecta la disponibilidad de agua en los arroyos y reduce la capacidad de los bosques para secuestrar carbono.
Modelos y proyecciones
Utilizando herramientas de datos, los investigadores modelaron escenarios futuros con diferentes niveles de precipitaciones. Descubrieron que los bosques con árboles más sedientos tendrían una mayor vulnerabilidad al cambio climático. Martin señaló que los modelos anteriores no consideraban las diferentes necesidades de agua de las especies de árboles, subestimando la amenaza del cambio climático en áreas con poblaciones crecientes de árboles porosos difusos.
Importancia de la planificación y conservación
La investigación destaca la necesidad de considerar las interacciones entre especies de árboles y el clima en los esfuerzos de conservación y planificación del uso de la tierra. Los esfuerzos de extinción de incendios y los períodos húmedos prolongados han permitido un crecimiento explosivo de árboles difusamente porosos, lo que subraya la importancia de gestionar estas poblaciones para crear ecosistemas más resilientes en el futuro.