El resultado electoral de la postulación a la reelección del alcalde G. Suazo ha resultado un FRACASO.
Así, con mayúsculas.
Acá algunas explicaciones de su cuarto lugar entre diez postulantes, todos sin experiencia previa en el ejercicio del cargo.
La rotación en cargos directivos de confianza.
G. Suazo en menos de 4 años designó 4 directores titulares de SECPLAN.
El cerebro del municipio, donde se planifica la ciudad, tuvo una rotativa de directores que raya en lo ridícula.
Si se suma a los directores no titulares que ejercieron el cargo la cantidad aumenta a casi el doble.
Sencillamente impresentable.
Los directores jurídicos y administradores municipales titulares suman 3 en cada cargo.
En un ejercicio de 4 años el promedio es risible.
La pérdida de proyectos emblemáticos.
A la techumbre de la feria libre y el polideportivo se sumó el abandono de las obras del gimnasio del liceo politécnico, la falta de iluminación de las calles, los graves litigios judiciales y una larga lista difícil de abordar en una sola columna.
A todo ello debe sumarse la singular promesa de campaña de dejar los caminos rurales “como mesa de billar”.
Promesa ciertamente imposible de cumplir.
Pero como por la boca muere el pez, la ciudadanía no olvidó, ni perdonó.
La falta de visibilidad de inversión pública en infraestructura general, en comparación con los millonarios presupuestos anuales, resultó imposible de explicar y difícil de entender dada la experiencia de G. Suazo como DOM y su título profesional de arquitecto.
El lema de campaña: “Sigamos Creciendo”.
Fue lo mas cercano a una auto burla.
Por mucho que uno quiera defender a una administración debe hacerlo con responsabilidad y en términos medianamente objetivos.
San Carlos, bajo la administración de G. Suazo, objetivamente no creció.
Y los electores lo saben.
Un lugar en la historia.
Hay finalmente sólo un motivo por el que G. Suazo pasa definitivamente a la historia.
Es el primer alcalde de San Carlos que, desde el retorno a la democracia, no es reelecto.
Si lo fueron C. Ortiz, S. Rodríguez y H. Gebrie (2 veces).
G. Suazo, no.
Escribe: Martín González