NACIONAL.- Entre los hijos se formaron dos bandos. Uno de los principales conflictos era que la hija menor, Colombina Parra Tuca, fuera la máxima beneficiada.
El miércoles 22 de mayo, se puso
fin a la disputa judicial por la herencia del poeta Nicanor Parra, quien
falleció el 23 de enero del 2018, a los 103 años.
Fue ese día que los abogados
confirmaron a tres juzgados civiles (8°, 12° y 17°) que “las partes han
arribado a una transacción de carácter privada”, según informó La Tercera.
Una de las partes está compuesta
por los hijos Alberto y Catalina Parra Troncoso; y, por otra, están Francisca
Parra Troncoso, Colombina Parra Tuca, Nicanor Parra Muñoz y Juan de Dios Parra
Tuca.
Si bien decidieron que los
términos no fueran públicos, las familias harían en los próximos una
declaración pública.
El acuerdo implica el testamento,
la administración de los bienes, derechos de autor y el rol de los hijos de
Nicanor Parra en la fundación que lleva su nombre.
Además, establece que los
hermanos Alberto y Catalina Parra Troncoso ponen fin a la arremetida para
anular la personalidad jurídica de la Fundación Nicanor y, por ello,
desistieron del juicio iniciado en contra de la Municipalidad de Las Condes.
Asimismo, las partes solicitaron
al Tribunal que el administrador proindiviso, José Alfredo Rojas, rinda cuenta
final sobre su gestión a cargo de la administración de los bienes de la
herencia del también físico.
La historia judicial
El embrollo judicial comenzó el 6
de junio de 2018, cuando Alberto y Catalina Parra Troncoso, presentaron una
demanda de nulidad al testamento de su padre. En ese momento, ellos afirmaron
que su padre no tenía las facultades físicas ni mentales a la hora de redactar
su testamento.
En esa línea, ambos se oponían a
que la hija menor del antipoeta, Colombina Parra Tuca, fuera la máxima
beneficiada legalmente.
De acuerdo al mismo medio,
Colombina Parra, quien fue designada como albacea del testamento, lo que
fue el centro de la discusión. Sus hermanos mayores apelaron a su gestión y
demandaron que rindiera cuentas. En 2019, 24º Juzgado Civil de Santiago revocó
su rol de albacea y designó un administrador provisorio para manejar la
herencia.
Otro aspecto del conflicto fue la
disputa de las obras de arte de Violeta Parra, hermana de Nicanor, quienes
estaban en posición del académico. Tras su muerte, la Fundación Violeta Parra
solicitó su restitución, ya que señalaron que estas fueron llevadas a su hogar
después del golpe militar de 1973.
Fuente: The Clinic