Opinión.- En Chile hay más de 15 millones de chilenos que están habilitados para sufragar. De acuerdo con los datos del Servel, sufragaron más de doce millones y medio de personas, lo que equivale a más del 84% de los electores.
Los votos blancos y nulos fueron más de 2 millones 700 mil votos.
Y el resultado hasta ahora es de 22 cupos para el partido repúblicano, 17 cupos para el sector oficialista, es decir, los partidos que respaldan al gobierno y por el contrario, el partido de la gente y los partidos de la antigua concertación, no obtuvieron ni uno.
Seguro que usted ya ha escuchado esta noticia durante todo el día, pero no está de más aclarar cómo sigue este proceso.
La nueva propuesta de Constitución ya la hizo una comisión de expertos. Ahora esa propuesta la toma el Consejo Constituyente para lo cual nosotros votamos ayer. Estará conformado por 50 miembros de manera paritaria. Por eso los partidos que obtuvieron cupo aún esperan para informar la nómina final. Por norma deben ser 25 hombres y 25 mujeres.
Este consejo tiene cinco meses para afinar la propuesta y por supuesto, incorporar sus propias ideas o matices.
Finalmente, el 17 de diciembre seremos convocados a votar en el plebiscito de salida. Esta vez nos preguntarán si estamos a favor o en contra del texto de nueva Constitución.
Los analistas internacionales y expertos, se sorprenden de cómo hubo una mayoría tan abrumadora pidiendo un cambio de Constitucional y luego cuando se instala toda la maquinaria para hacerlo, cambiamos de opinión.
Personalmente tengo la sensación que, en general nos cuesta entender qué rol, o finalidad cumple la Constitución de un país, creo que a veces la confundimos con lo que hace una ley. Y hay mucha diferencia….
¿Por qué cree usted que ha sucedido este cambio tan drástico? Le dejo otra inquietud, ¿conoce usted el fin de una ley y cuál es la diferencia con la Constitución de un país?
Claudia Espina Videla
Administradora Pública