Autoridad debe fiscalizar a propietarios y multar a quienes botan basura
LOCAL.- La tarde de este lunes y mientras Bomberos llamaba a sus voluntarios para ir nuevamente en apoyo a Bomberos de Quillón, un llamado para concurrir al “380” por un incendio de pastizales volvió a poner de relieve esta negativa situación que afecta al sector sur de la ciudad.
Por la continuación de la calle O’Higgins al sur del camino desemboca en la ruta 5 a la altura del km. 380 y si bien se ha ido poblando a ambos lados del camino, el sector aledaño donde hay varios predios a la ruta 5 es foco continuo de incendio de pastizales y microbasurales que movilizan reiteradamente a Bomberos.
En más de una oportunidad en temporadas anteriores las poblaciones construidas en las cercanías han estado próximas a ser afectadas por estos incendios, por lo que la autoridad fiscalizadora debe tomar acción para evitar nuevos incendios en el lugar.
En el sector “Pajonal o “380”se ha registrado un promedio de 10 incendios cada temporada en los últimos años, según confirmó Bomberos de San Carlos a este diario electrónico.
Conocedores de un hecho reiterado en los últimos años, las autoridades, que ayer lunes coincidentemente se reunían en el municipio para coordinarse ante posibles emergencias, deben fiscalizar a los propietarios y a quienes botan basuras en dichos sector.
También se debe exigir a los propietarios el retiro de rastrojos y la limpieza de pastizales en sus predios, ya que resulta hasta abusivo el trabajo al cual se ve obligado permanentemente Bomberos en ese lugar.
Lo anterior es parecido a lo que ocurre con los reiterados incendios en las zonas sur y norte de la estación de ferrocarriles donde también hay incendios de microbasurales en forma reiterada y obligan a un trabajo que distrae a Bomberos de reales emergencias.
La fiscalización por parte de inspectores municipales a los dueños de los predios del sector “380” debiera ser una actuación urgente, para la limpieza de matorrales y rastrojos.
También se hace necesario que se limpie y retire la cantidad de basuras que hay a ambos lados del camino, que es el material que posteriormente irresponsables le prenden fuego.