El gobernador Crisóstomo, junto con agradecer al Presidente por decretar emergencia agrícola en la Región de Ñuble, recordó que la solicitud fue hecha hace dos semanas en ocasión de la reunión que sostuvieron con la Asociación de Gobernadores y Gobernadoras de Chile y “la petición que habíamos hecho, era que este decreto viniera con recursos frescos porque no sacábamos nada con hacer una declaración de emergencia, si lo que iban a hacer los servicios públicos era finalmente una reasignación de los recursos del sistema”.
Sugirió que “los municipios tienen que estar en este proceso, los servicios públicos tenemos indudablemente un enfoque, pero en una crisis como esta, los agricultores y la ciudadanía en general, las primeras puertas que van a golpear van a ser de las municipalidades, por lo tanto, quería solicitar que parte de estos ocho mil millones de pesos fueran destinados a los municipios, que van a ser más gravemente afectados en esta crisis que hoy se está generando”.
Y a la vez, la máxima autoridad propuso que, parte del fondo del Plan Sequía, “se enfoquen en obras que hoy están pendientes en la Región de Ñuble, si destináramos parte de esos recursos, cerca de 70 mil millones de pesos, podríamos hoy estar regando entre 10 mil y 25 mil hectáreas producto del Embalse Laja que le faltan las canalizaciones para poder cubrir más hectáreas de riego”.