DEPORTES.-Jenny Castro .- El joven agricultor Daniel Curiñir y su madre María Elena
Cayuleo están felices, ya que dieron un gran paso para comercializar su
producción de 2 hectáreas de repollos lisos, variedad Sake, los que cultivan en
el sector Punta de Riel de la comuna de Teodoro Schmidt, en La Araucanía.
Gracias al apoyo de INDAP, estos emprendedores campesinos
ingresaron al convenio de compras públicas que la institución mantiene con
Junaeb, para abastecer con sus hortalizas frescas y sanas a Merken SPA, empresa
concesionaria del Programa de Alimentación Escolar (PAE) que entrega raciones alimenticias
a jardines y colegios de la región.
Durante una visita al predio de esta familia, la directora
regional de INDAP, Carolina Meier, dijo que esta virtuosa alianza entre INDAP y
Junaeb ha permitido que 30 pequeños agricultores de La Araucanía, en forma
individual o asociativa, puedan comercializar hoy sus productos de manera
sustentable, proyectando ventas por $2.330 millones.
Meier agregó que “este convenio, al que se suman Juan y su
madre, forma parte de los desafíos del Plan Impulso, en la línea de generar
encadenamientos productivos para la comercialización. Actualmente esta alianza,
donde esperamos seguir incorporando a más pequeños agricultores, ha generado
ventas que superan los $200 millones en los rubros de hortalizas de cuarta
gama, tomates, hortalizas frescas y miel”.
Daniel Curiñir y María Elena Cayuleo
Daniel Curiñir, junto con agradecer a INDAP, mostró su
orgulloso por este importante logro que le abre una oportunidad para vender su
producción. ”Tenemos proyectado entregar 6.500 kilos de repollos para la
alimentación saludable de los escolares de aquí a fin año, y la próxima
temporada esperamos abastecer a la empresa con 3 mil kilos de coliflor y 7 mil
kilos de betarragas al mes", expresó.
El joven agricultor, de profesión agrónomo, tomó como opción
de vida quedarse en el campo para poner en práctica todo su conocimiento y
experiencia y así hacer más productivas las tierras de sus padres. Cuenta que
tradicionalmente se dedicaban al cultivo de papas, pero decidieron reconvertir
su producción por la inestabilidad del mercado: “Ahora estamos cultivando
repollos, aprovechando la calidad de los suelos, la superficie para la rotación
de cultivos y disponibilidad de agua, además que es un cultivo más rentable”.
El gerente de Compras de Merken SPA, Juan Manuel Trelles,
señaló que “los agricultores locales nos están abasteciendo con productos de
calidad y frescos que entregamos para la alimentación de los escolares. Como
empresa, y con el apoyo de INDAP, tenemos las puertas abiertas para que se sumen
otros productores de la región”.
La familia Curiñir Cayuleo es usuaria del Programa de
Desarrollo Territorial Indígena (PDTI) INDAP-Conadi, donde ha recibido apoyo en
asesoría técnica, incentivos, créditos y habilitación de obras de riego para
potenciar su cultivo de repollos, que se proyecta como un atractivo negocio
para mejorar sus ingresos y calidad de vida.