Esta Asamblea valora las grandes movilizaciones sociales de los últimos días de parte de la ciudadanía, que han sido capaces de generar una ruptura hegemónica, cultural y social, urgente para nuestro país.
Valora la madurez del movimiento ciudadano, integrado por jóvenes, familias, organizaciones sociales, gremios y profesionales, que como agentes de cambio y en una actitud pacifista desea soluciones reales y concretas a sus demandas, en un tiempo no muy lejano.
Reconoce la responsabilidad de la clase política, en la falta de empatía y muchas veces, la violencia verbal de algunos ministros, frente al sentir nacional de desigualdad e injusticia.
Reconoce que se proclamó la privatización de servicios públicos fundamentales, como la salud, las pensiones, los servicios sanitarios y la educación, los cuales fueron propuestos como estrategias para alcanzar el desarrollo y prosperidad de todos y todas los chilenos. No obstante, las medidas implementadas en torno al modelo económico fueron ineficaces, aumentando la desigualdad, segregación social y provocando un profundo malestar en la ciudadanía.
Esta Asamblea sabe que no estamos en guerra y hace un llamado a informarse, a tener una visión más completa de lo que está pasando en nuestro país, a conservar nuestra democracia y a promover el diálogo y los acuerdos, sin un estado de sitio ni toque de queda.
Que la prudencia y el diálogo, permitan un liderazgo firme y consecuente, donde la tolerancia y la voluntad, sean los elementos que generen las condiciones para dar soluciones a las demandas ciudadanas.
Que la agenda de trabajo nazca de la ciudadanía y no impuesta por la clase gobernante, para que nuestro querido Chile, sea cada día, un mejor lugar para vivir, trabajar, soñar y amar.
Con la fraternidad de siempre,
Asamblea Partido Radical de San Carlos.