Rodrigo Fuentes.- Familiares y afectados por la organización liderada en su
momento por Paul Schafer, deberán recibir reparación económica a partir del
próximo año, tal como lo decidió el Bundestag en una sesión nocturna.
El Parlamento alemán aprobó un fondo de un millón de euros
para indemnizar a las víctimas de Colonia Dignidad, asentamiento ubicado al
interior de la ciudad de Linares, Región del Maule.
El enclave fundado en 1961 por el exmilitar nazi Paul
Schafer, sirvió como centro de detención y tortura durante la dictadura cívico
– militar de Augusto Pinochet.
Además de ser utilizado para fines represivos en la década
de los 80, hasta el año 2005, en Colonia
Dignidad, unas 300 personas fueron sometidas a trabajos forzados, castigos y
manipulación mental, a lo que se suman los abusos sexuales cometidos contra
menores.
La presidenta de la Asociación por la Memoria y los Derechos
Humanos Colonia Dignidad, Margarita Romero, valoró la decisión tomada
recientemente por los legisladores alemanes.
“Una medida muy esperanzadora para las víctimas, merecen una
reparación luego de haber vivido en el sistema de esclavitud que se implementó
al interior de Colonia Dignidad. Espero que también se incluya a todos aquellos
niños chilenos que en ese entonces fueron prácticamente secuestrados en el
lugar, que también sufrieron abusos sexuales y, quienes hoy, llevan una vida
marcada por violaciones a sus derechos humanos”, afirmó.
Además de la ayuda económica directa y concreta a las
víctimas de la hoy llamada Villa Baviera, se sumará otro monto ya aprobado para
otros cometidos, como la construcción de un centro de encuentro y memoria.
La integrante de la Comisión de Derechos Humanos de la
Cámara de Diputados, Emilia Nuyado, además de celebrar la decisión, criticó al
Gobierno de Sebastián Piñera por retirar iniciativas de ley que iban en la
misma dirección de reparación.
“Imagínese el proyecto que finalmente el actual Gobierno
desechó recién asumido su período, argumentando falta de recursos. Una idea
legislativa que tenía que ver con la reparación a víctimas y familiares, muchas
ya fallecidas o con delicado estado de salud, entonces ahí puede constatar la
deuda que se tiene, no solamente económica, sino que también judicial, ya que
en muchos casos no se sabe el paradero de las personas ni qué ocurrió al
interior del recinto”, argumentó.
Destacar que el actual ministro de Justicia Hernán Larraín,
fue un público defensor del enclave alemán y de su líder Paul Schafer.
Sobre el mecanismo para destinar los recursos económicos
dispuestos por el Estado germano a las víctimas de Colonia Dignidad, el
parlamento del país europeo acordó que el dinero no podrá emplearse hasta que
no se presente un plan claro de ayuda que precise de qué manera y a qué
concepto será asignado.
Procedimiento que será trabajado por la comisión conjunta
integrada por diputados alemanes de todos los sectores políticos junto a
representantes del gobierno de la canciller Ángela Merkel.