Publicado: Viernes, 29 Diciembre 2017 07:07 Escrito por Mario San Martin
No solo se trata de hacharle "una manito de gato" a la piscina municipal,
sino de habilitarla con todas sus dependencias, personal adecuado y cumpliendo las normativas sanitarias.
La explicación la dio el administrador municipal, Patricio Moya, quien señaló que se está tramitando las correspondientes autorizaciones y las contrataciones respectivas para de ahí, poder abrir la piscina al uso público los primeros días de enero de 2018.
Primero los permisos y el personal
Niños de la población Portales del Sur habían recibido el mensaje de que podían ir a la piscina pero, sus padres comprobaron que aún se debe terminar por cumplir con todas las normativas y de la salud de la población, especialmente los niños, corresponde.
No se debe olvidar que en las piscinas las personas se ponen en riesgo, tanto por la falta de higiene como por la ausencia de seguridad y por ello se debe contratar salvavidas por turnos y personal de aseo, entre otros en el caso de la piscina municipal de todas aquellas autorizadas que, a la fecha en San Carlos son solo dos, Alumga y Espacio Aitue.
Como se recordará en marzo pasado la DOM informó que la piscina después de sus más de 50 años de uso, presentaba grietas y filtraciones y otras deficiencias estructurales y recomendaba la construcción de una nueva.
Por las conocidas "diferencias" entre la Alcaldía y la DOM se determinó que se realizarán trabajos de pintura y se taparán las filtraciones con el objeto de dar uso público a este recinto en la temporada estival.
El Mal estado de la Laugna municipal
Otro caso que deberá regularizar el Municipio es la alicaída y descuidada laguna del parque Quirel, donde su funcionamiento exige salvavidas, protecciones, personal adecuado autorizado por la Armada, baños de uso público (recordemos que los casinos están arrendados) y otras exigencias para seguridad del público.
Existe preocupación por saber en qué estado se encuentran todos los botes y embarcaciones que el municipio compró y que la comunidad vio cómo se fueron hundiendo y destruyendo en el invierno pasado. Este recinto también requiere una acción regularizadora.
Piscina y locales sin permiso
Mientras la alcaldía tiene esta preocupación, por otro lado han surgido particulares que han encontrado un buen negocio arrendando sus piscinas particulares al público y se publicitan a través de la redes sociales, lo que no estaría mal, siempre y cuando cumplieran con todas las normativas municipales, de salud y tributarias.
Lo anterior es un claro ejemplo, de lo que le ha señalado reiteradamente al alcalde el director de Control Municipal, fiscalización y obtención de pagos de permisos por actividades comerciales.
Por último, hay comerciantes de estos rubros que pagan impuestos, generan fuentes laborales y cumplen con las normativas para piscinas y centros de eventos a quienes se le afecta cuando no hay una fiscalización a la altura de una pretendida comuna "turística", otro claro ejemplo de esto es el "sometido" comercio local.