Publicado: Viernes, 17 Marzo 2017 07:02 Escrito por Mario San Martin
Aún no se resuelve el conflicto al interior del DAEM en San Carlos, donde la Unidad de Control descubrió una serie de irregularidades
y que el concejo municipal determinó denunciar ante la Contraloría regional.
Respecto de los casos de doble régimen laboral, donde la Unidad de Control cuestionó que profesores que hoy son directivos en el DAEM, mantuvieran beneficios e ingresos de sus contratos en aquellas escuelas desde donde salieron hace varios años, se ha sabido en las últimas horas que al menos dos de las funcionarias estarían por renunciar a sus escuelas de origen para continuar en el DAEM, lo que no ha sido confirmado y seguramente se conocerá en la sesión de este viernes en el concejo municipal.
Las otras dos funcionarias registran una cantidad importante de años de servicio como profesoras, por lo que, dejar esos contratos de aula les significaría un considerable deterioro económico, pero no se han definido a la espera de la resolución que debe tomar el sostenedor. Otro de los cuestionamientos a la administración es la prolongada subrogancia en la dirección del DAEM, donde por varios años y con solo algunos intervalos, el sostenedor ha mantenido a un subrogante. Por estos días y aduciendo falta de presupuesto, nuevamente ha solicitado postergación para el llamado a concurso público a ocupar el cargo de director del DAEM.
Pese a críticas del concejo municipal, el DAEM sigue en manos de administrativos que no tienen las condiciones que la normativa exige y tras la licencia del subrogante Marcial Valenzuela, está actuando como Director del DAEM (S) el administrativo, Héctor Zárate.
También está el cuestionado caso de la dirección del Liceo politécnico, donde los ediles le han planteado al sostenedor, lo inconveniente que resulta que este establecimiento no tenga un director validado administrativamente.
La normativa establece que las subrogancia deben ser servidas por directorales titulares.
Para la sesión de este viernes el concejo deberá aprobar una nueva modificación presupuestaria, que no es otras cosa que sacar recursos de otros ítem de educación para entregarlos a educación y así se pueda contratar el servicio de locomoción escolar con el cual el sistema pretende retener matrícula.