La institución de desarrollo social que cuenta con casi 14 años de trayectoria, entrega apoyo a
microempresarias(os), que en su mayoría, pertenecen al 20% más vulnerable del país.
Carmen Carreño (57) es una de esas personas que se siente plena con lo que hace, especialmente, cuando se trata de ayudar a los clientes que requieren de sus servicios. Hace 25 años decidió dedicarse por completo a la masoterapia y cosmetología, disciplinas en las que se fue instruyendo hasta conseguir importantes conocimientos.
Tras consolidarse como masoterapeuta, cosmetóloga y estilista, Carmen quería independizarse y formar su propio emprendimiento. De esta forma, partió con un pequeño centro de estética integral, ubicado en el centro de Chillán, el cual fue potenciando gracias al apoyo de Fondo Esperanza, institución que le brindó el financiamiento que requería para crecer.
Por medio del apoyo de FE, la emprendedora remarca que pudo reacondicionar su local y equiparlo con la adquisición de camillas, sabanas, muebles y todo lo indispensable para que su negocio creciera. Masajes de relajación, descontracturantes, reductivos; drenajes linfáticos, limpieza facial y un sinfín de servicios son parte de lo que ofrece en su centro llamado "Bagua".
Empeñosa y trabajadora, la mujer destaca que las capacitaciones y redes generadas en FE, han sido importantes para su crecimiento como pequeña empresaria. En esa misma línea, cuenta que su local lo comparte con compañeros de su mismo Banco Comunal (BC), complementando el recinto con peluquería o terapias alternativas. "Transformé un lugar pequeño, en algo óptimo para trabajar", enfatiza.
Sobre su experiencia en la institución afirma: "Ha sido buenísima. Siempre recomiendo a Fondo Esperanza, porque encuentro que es un apoyo para las personas que no tienen de dónde agarrarse para para iniciar algo. Ellos nos entregan una oportunidad para surgir", finaliza Carreño.
Con casi 14 años de trayectoria, la institución de desarrollo social apoya a microempresarias(os), que en su mayoría, pertenecen al 20% más vulnerable de la población chilena, muchas(os) de ellas(os) excluidas(os) del sistema bancario formal.
Entre los requisitos básicos para acceder a los servicios de FE están: Ser mayor de 18 años y contar con un negocio –formal e informal - en funcionamiento (al menos seis meses). Para formar parte de la comunidad emprendimiento solidario más grande de Chile, las(os) interesados(as) deben llenar un formulario en www.fondoesperanza.cl/contacto/ o contactarse al fono 800430055.
Durante julio, ¡Súbete a la micro del emprendimiento! Porque Fondo Esperanza cambia la vida de las personas y de quienes las rodean.