Junto al cerco
de 8 hebras de alambre que llega a las puertas de lo que se ha llamado el parque y casa patronal de valor histórico
en el recinto “Alumga”,
se ofreció una conferencia de prensa por parte del
empresario Rubén Garrido, ventilando antecedentes de una disputa económica que involucra a dos conocidos sancarlinos.
Se trata del empresario
panadero, Sinesio Castaño y el empresario metalmecánico, Rubén Garrido. El
primero demandó y obtuvo sentencia favorable
por una franja de terreno de 25 metros de ancho por 950 de largo que,
parte en dos el parque y la casona que existente al interior del complejo recreativo
“Alumga”.
A la declaración
pública del empresario Sinesio Castaño surgió la respuesta del empresario Rubén
Garrido, a través de una conferencia de prensa efectuada “in situ”
el sábado por la tarde.
Mientras el
primero se refiere al caso judicial como algo ya terminado, Garrido, a través de
su abogado, Jaime Venegas pone el foco de atención en la franja recientemente cercada y que divide el parque y la casona de valor
histórico.
En la
conferencia el abogado Venegas a nombre
de su cliente, señaló “En el marco de
una situación judicial ya consumada –con una sentencia injusta, pero legal en
el marco de nuestra Constitución- mi actual abogado, don Jaime Venegas Duffau y
yo hemos señalado incansablemente, en todas las instancias donde nos ha sido
posible expresarnos, la amenaza que se cernía sobre los bienes culturales de
nuestra comuna: la casa patronal y el parque histórico. Resulta así curioso que
el sr. Castaño califique estas gestiones como ardides para evitar el
cumplimiento del fallo que le beneficia, y que a reglón seguido afirme su
compromiso inclaudicable con el desarrollo de San Carlos y de su gente, pues a
lo menos es contradictoria su declaración de intenciones con sus hechos
concretos.
Lo cierto y
evidente es que el sr. Castaño procedió a ejecutar el fallo que le favorecía
tomando posesión no solamente de gran parte de la cancha de fútbol situada al
norte de la casa patronal, hasta el borde del camino de Cape, sino también de
la mitad del parque histórico aledaño a la casa. Esto lo hizo erigiendo un
cerco de 8 hebras de alambre de púas, llegando incluso al absurdo de tender el
cerco sobre la mitad de una pileta existente en el parque, y sólo deteniéndose
ante la fachada de la casa patronal, lo que revela la poca importancia que para
él tiene la recuperación de lo que supuestamente es su terreno, ya que la
sentencia le permite erigir el actual cerco divisorio pasando por la mitad de
la construcción e incluso más allá”.
En la
conferencia se encontraba también presente el Alcalde Gebrie que, en su estilo
lanzó duras declaraciones en contra del anterior abogado del empresario Garrido por perder el juicio y
también en contra del empresario Castaño
y su hijo.
Llama la
atención la propuesta que ha señalado el
Alcalde Gebrie y que habría llegado a través del abogado del empresario Castaño, donde este podría donar una parte de la zona histórica
en conflicto y que el afectado donara la otra en favor del municipio, lo que
resulta por decir lo menos “curiosa” si se trata de ayudar a quien aparece como
afectado.
Actualmente el
municipio tiene presentada un recurso ante
la justicia que busca proteger la casona
y parque al cual le asignó valor histórico, en tanto Garrido ha demandado por
daños ya que al instalar el nuevo cerco se habría borrado un canal, destruido
unas cañerías y un pequeño puente.