Ayer lunes en el tribunal Oral en
Chillán se comenzó a ver el caso de la supuesta violación de una joven y donde
hay un imputado que ha permanecido 7 meses preso.
Durante el desarrollo de la audiencia
el fiscal Rolando Canahuate expuso los antecedentes del caso y pidió 10 años y
un día de presidio para el imputado, mientras el abogado de este hizo ver que no hay pruebas suficientes para
acusar a su defendido el que además tiene un 37% de incapacidad.
Como se recordará este hecho
ocurrió la mañana del domingo 1 de diciembre, cuando la joven que acusa de
violación se encontraba celebrando desde
la noche anterior, un cumpleaños en el recinto de la piscina municipal y habría
ocurrido en horas de la mañana cuando fue al baño, donde habría sido sorprendida
por el cuidador del lugar, I. Ortiz a quien acusa de violación.
Por su parte el inculpado declaró
que esa mañana sorpresivamente había sido agredido unos jóvenes y que luego
Carabineros lo detuvo acusándolo de violación y fue llevado a los tribunal y
luego recluido por 7 meses hasta la fecha.
Un dato que se conoció en la
audiencia es que la joven denunciante, a las 10 dela mañana cuando se le
practicó el examen de alcoholemia registró 1,70 de alcohol en la sangre, lo que
hace suponer que a la hora los hechos su estado era mucho mayor. Recordemos que,
según las estimaciones cada 3 horas baja un grado.
También la defensa del imputado
señaló que la víctima ha cambiado su versión respecto de la hora y el lugar,
entre otros antecedentes. Agregó que el examen practicado a la mujer no presentó
lesiones atribuibles a violación, por lo que el abogado, Ricardo Robles, está
convencido de que su cliente será
absuelto y reiteró que la supuesta
víctima ha sido divergente en más de una
oportunidad y recalcó que no hay testigos del hecho.
El fiscal Rolando Canahuate ha dicho a la prensa que habría pruebas suficientes, aun cuando no
ha entregado detalles, para
acreditar el delito.
El juicio oral que comenzó este
lunes podría concluir entre jueves o viernes de la presente semana y se
desarrollan audiencias para conocer informes, declaraciones y otros antecedentes que se incorporarán en el juicio, tanto por el
persecutor Rolando Canahuate, como el abogado de la defensa, Ricardo Robles.