Ñuble fue protagonista en el Catad’Or World Wine Awards 2025, donde la Viña Doña Elita, de Elia Fierro en Ránquil, obtuvo una Medalla Gran Oro y el Trofeo al Mejor Vino Ancestral por su Cinsault 2022. Este reconocimiento consolida su labor en el rescate de las cepas patrimoniales del Valle del Itata.
El logro se suma a un resultado histórico para la región: otras 10 viñas familiares apoyadas por INDAP recibieron 14 medallas de oro, reflejando el talento y la innovación de la Agricultura Familiar Campesina del Itata. Entre las viñas destacadas figuran Trifulca, Cortez, El Guindo, Guarilihue Familiar, Hermanos Díaz, La Kura, La Misión de Francisco, San Luis, Tres C y Viejo Encino, todas comprometidas con el valor territorial y la tradición vitivinícola.
El Valle del Itata reafirma su liderazgo vitivinícola
La premiación se realizó en el Monticello Gran Casino de Mostazal, en el marco de los 30 años del certamen, reconocido por la OIV y VINOFED, que agrupan los principales concursos enológicos del mundo. A nivel nacional, 37 viñas familiares obtuvieron 53 medallas, reafirmando el potencial de la agricultura campesina chilena y la calidad de sus vinos ancestrales.
Premios que destacan la agricultura familiar chilena
El Catad’Or 2025 ratifica el crecimiento del Valle del Itata como referente del vino patrimonial, donde pequeños productores trabajan con pasión, rescatan variedades antiguas y promueven prácticas sostenibles.
