Cada año, el hongo oídio genera pérdidas superiores a los 50 millones de dólares en la industria vitivinícola chilena. Para combatirlo, se aplican grandes cantidades de fungicidas, lo que eleva los costos y compromete la sostenibilidad del sector.
Frente a este desafío, un equipo de investigadores de la Universidad Autónoma de Chile, sede Talca, liderado por el Dr. Patricio Arce, ha desarrollado vides resistentes al oídio. El proyecto busca reducir el uso de pesticidas sin afectar la calidad del vino y cuenta con el respaldo técnico y comercial de Viña Concha y Toro.
“Tenemos las plantas resistentes. El convenio con Concha y Toro nos permite evaluar su calidad comercial y avanzar hacia una producción masiva”, explicó Arce. La colaboración incluye pruebas de propagación, evaluación enológica y preparación para su futura comercialización.
El desarrollo es financiado por ANID a través de un fondo FONDEF IT y tiene como objetivo reducir en un 50% el uso de fungicidas, una meta nacional e internacional que la viticultura convencional no puede alcanzar fácilmente.
Aunque el trabajo formal inició hace tres años, el proyecto se apoya en más de 15 años de investigación acumulada. Ya se proyecta que en 2027 pueda iniciarse la primera producción comercial de vinos provenientes de estas nuevas variedades resistentes.
“Este año registraremos cinco variedades junto con la Universidad. Esperamos entre 400 y 500 hectáreas en producción hacia 2031”, indicó Arce. Además, destaca el papel de Concha y Toro en la iniciativa, señalando que “es una viña que valora la ciencia y nos ha apoyado desde el primer momento”.
La Universidad Autónoma ha sido clave en impulsar el proyecto. Ana Gutiérrez Moraga, directora de investigación corporativa, enfatizó la importancia de esta alianza. “Demuestra que es posible generar confianza entre la academia y la industria, y responder a demandas concretas de la sociedad”, afirmó.
Por su parte, Álvaro González, director del centro de investigación, resaltó la estrategia de I+D abierta y colaborativa del equipo. “Somos un grupo pequeño, pero con una visión clara: crear soluciones desde el conocimiento y en conjunto con el sector productivo”.
🍇El proyecto no solo representa un avance científico, sino también una apuesta estratégica para la viticultura nacional. Con plantas más resistentes, menor uso de químicos y respaldo comercial, Chile se prepara para una nueva era en la producción de vinos sostenibles.
📌 Avances destacados del proyecto:
Reducción esperada del 50% en uso de fungicidas
Cinco variedades de vides resistentes en proceso de registro
Primera producción comercial estimada para 2027
Apoyo técnico y comercial de Viña Concha y Toro
Proyección de 400-500 hectáreas de viñedos hacia 2031
Fuente: uautonoma.cl