Por la entrada norte del Mercado de San Carlos, en calle Matta se emplaza la verdulería Salazar, la cual lleva más de 70 años abasteciendo los hogares de los sancarlinos al mando de los hermanos Nelson y Eledin Salazar.
Inicios
Sobre el tema, Nelson Salazar, recordó que “todo comenzó con mi padre llamado Eledin de las Rosas Salazar Meza, quien nació en Chuquicamata en el año 1917. Tras residirse en Chillan, luego llegó a San Carlos y abrió su verdulería hace como 70 años. Somos ocho hermanos que desde niños estuvimos dedicados al negocio. Tras morir mi padre a los 87 años, con mi hermano mayor Eledin Segundo asumimos la administración de la verdulería”.
Comercio
En esta época del año, Edelin Salazar explicó que “lo que más se vende son los tomates. Les siguen las sandias y los melones que son de la temporada. Después les siguen la uva y las manzanas”.
Los hermanos Salazar, quienes atienden de lunes a sábado desde las 09:00 hasta las 19:30 horas, sostuvieron que “toda la mercadería que vendemos es fresca y nos llega directamente desde Talca. Llegan a la verdulería familias que han comprado por años o clientes que recuerdan como sus abuelos o padres venían a comprar”.
Ante el alza de comercio ambulante, Nelson Salazar lamentó que “esta situación nos ha afectado bastante, ya que tenemos que competir con vendedores que no pagan contabilidad, no emiten boletas y no tienen que estar pagando patente para trabajar. Solo tienen que pedir un permiso. Si no pagase la patente nos arriesgaríamos a pagar una multa. Es una situación que terminara cuando se cierren todos los comercios. Ni siquiera respetan los espacios que los otorgan, ya que usan grandes mesones que ocupan toda la vereda”.
En consulta sobre el presente del Mercado, los hermanos Salazar aseveraron que “se ha mantenido igual a como lo recordamos cuando éramos niños. Tristemente, ya no es un mercado municipal, ya que tras salir Pinochet, este se vendió. En el caso nuestro, somos propietarios del local, ya que en aquel entonces mi padre lo compró. Ahora se perdió la mística, ya que hay solo cocinerías y fruterías. Dejó de ser un lugar para comprar diferentes productos como antaño”.
Futuro
Con angustia, Nelson detalló que “junto a mi hermano Eledin somos los únicos que han seguido el legado de nuestro padre. El resto de los hermanos trabajaron en otros rubros y ya hay algunos que están jubilados. Los ocho hermanos nos criamos en el mercado y nuestra vida es aquí”.
Lamentablemente, los hermanos expresaron que “hemos visto como ninguno de los miembros de la familia que dejó mi padre, una vez que no estemos, quiera tomar las riendas del negocio. Entendemos que tienen otros objetivos y es parte de la vida. Los hijos, nietos y bisnietos tienen otros planes y no sabemos qué pasará con el negocio que nos dejó nuestro padre. Es algo que nos preocupa, ya que nos gustaría que alguno siga con la tradición. Valoro que como familia siempre hemos estado unidos afrontando situaciones buenas y malas”.