Avance científico desde Japón
Después de dos décadas de investigación, un equipo de científicos japoneses ha desarrollado un arroz genéticamente modificado que combate los efectos alérgicos del polen de cedro, una de las principales causas de alergias estacionales. Este avance tecnológico busca aliviar a millones de personas que sufren de fiebre del heno cada primavera.
Proceso de desarrollo y aplicación clínica
En Tsukuba, prefectura de Ibaraki, Japón, un arrozal solitario rodeado de vallas y muros produjo una cosecha de 440 kilogramos el 5 de septiembre. Este arroz, modificado genéticamente, fue diseñado para reducir la sensibilidad al polen de cedro mediante el consumo regular de pequeñas cantidades del alérgeno. Durante los ensayos clínicos en ratones y humanos, los resultados mostraron una disminución en la frecuencia de estornudos y la necesidad de medicación. Los estudios sugieren que este enfoque podría proporcionar un alivio significativo de los síntomas de la alergia.
Desafíos y futuro del proyecto
A pesar del avance, el proyecto enfrentó suspensiones y obstáculos regulatorios. Sin embargo, en 2023 se aprobó un nuevo estudio clínico bajo la supervisión del Ministerio de Agricultura de Japón. Este nuevo estudio se centrará en evaluar la efectividad y seguridad del arroz en un número mayor de sujetos durante dos o tres años. Además, se está considerando un plan para cultivar el arroz modificado en una granja interior dedicada para asegurar un suministro estable y de calidad.
El médico Tomonori Endo, quien participó en los estudios clínicos, tiene grandes expectativas y sugiere que el medicamento podría representar un tratamiento de próxima generación sin precedentes. Sin embargo, también advierte que podrían pasar entre cinco y diez años antes de que este medicamento revolucionario esté listo para su uso público.