La expresión “más chileno que los porotos” es ampliamente conocida en el país, reflejando una arraigada tradición alimentaria. Sin embargo, la realidad actual muestra una significativa dependencia de importaciones para satisfacer la demanda de esta legumbre en Chile.
Cambios en la producción y consumo de porotos
En la actualidad, solo el 25% de las legumbres consumidas en Chile son de producción local. Esta cifra revela una dependencia preocupante de las importaciones, lo que subraya la necesidad de revitalizar la producción nacional para preservar nuestro patrimonio alimentario. Según datos de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA), aproximadamente el 40% de los porotos consumidos en el país son importados, principalmente desde Canadá, Argentina, Perú y China.
Investigación académica: una llamada de atención
Las académicas de la Universidad de Chile, Cecilia Baginsky y Carolina Belmar, han investigado este fenómeno, evidenciando los profundos cambios en la producción y el consumo de legumbres en el país. La profesora Baginsky, del Departamento de Producción Agrícola, destaca la urgencia de modificar tanto nuestra forma de producir alimentos como nuestras dietas. “Debe haber un compromiso gubernamental para transitar hacia dietas saludables que incorporen un mayor consumo de legumbres de procedencia local”, plantea Baginsky.
Causas económicas y pérdida de terreno agrícola
La disminución en la producción de porotos en Chile es significativa. En la temporada 2023-2024 se cultivaron aproximadamente 6.500 hectáreas de legumbres secas, una cifra muy inferior a las 200.000 hectáreas sembradas en la década de los 80'. Este cambio se debe, en gran parte, a razones económicas, donde otros cultivos como los frutales (arándanos y cerezos) resultan más rentables.
Impacto en la soberanía alimentaria
La profesora Baginsky también alerta sobre los riesgos que esta dependencia de importaciones conlleva para la soberanía alimentaria del país. “Aunque la pandemia provocó un repunte en el consumo de porotos debido a su inclusión en las canastas básicas de emergencia, gran parte de estos porotos fueron importados”, señala.
Esfuerzos por rescatar la identidad cultural
A pesar de estos desafíos, existen iniciativas para rescatar y promover las variedades locales de porotos. La profesora Belmar, del Departamento de Antropología, subraya la importancia de estas iniciativas: “Si uno no va recuperando estas variedades, se pierde información histórica y cultural valiosa. Apoyar estas iniciativas puede permitir reactivar el consumo del poroto, especialmente de las variedades chilenas”.
La importancia de mantener nuestras tradiciones
Para que el dicho “más chileno que los porotos” mantenga su relevancia, es crucial revitalizar la producción local y rescatar nuestras variedades tradicionales. La relación de los chilenos con los porotos está profundamente enraizada en nuestra historia y cultura, y su preservación es esencial para nuestra identidad.
Conclusión
La alta importación de porotos en Chile desafía tanto nuestra identidad cultural como la seguridad alimentaria. Es imperativo que se tomen medidas para fortalecer la agricultura nacional y promover el consumo de legumbres de producción local, no solo para preservar nuestras tradiciones, sino también para asegurar un futuro alimentario sostenible y saludable para el país.