LOCAL. - Fue el ministro de fe del Concejo Municipal, secretario municipal Hernán Millán, quien contó los votos y estableció que la propuesta del alcalde de adquirir siete camiones para el servicio de aseo, era rechazada.
Con el resultado adverso concluyó este miércoles un cuestionado proceso que no logró la adhesión de los concejales, ya que no solo se trataba de adquirir siete camiones en $1.275 millones, sino que comprometía además otros $2.500 millones por 36 meses para contratar la mano de obra, propuesta que presentó el alcalde Suazo al final de su período y ad portas de ser aceptado como candidato en las próximas elecciones.
Se necesitaban cinco votos. A favor votaron el alcalde Suazo y los ediles García y Polanco. En contra lo hicieron Silva y De la Cuadra y se abstuvieron Méndez y Pizarro.
Si bien quienes estaban de acuerdo con la propuesta del alcalde Suazo, esgrimieron un buen manejo directo, lo cierto es que a la fecha no se ha podido conocer un análisis económico de cuánta es la real economía que significa que el municipio administre directamente este servicio.
La experiencia previa con SEAT (concesionaria anterior) demuestra que fue el municipio el que más falló. No hubo una revisión a tiempo de las negociaciones por parte del municipio, unido a la insuficiente vigilancia y no se advirtió a tiempo sobre eventuales incumplimientos del concesionario, ya que lo anterior, fueron los motivos que argumentaron para finalizar de manera anticipada el contrato con la empresa SEAT.”
Recordemos que actualmente hay una millonaria demanda de la empresa SEAT en contra de la Municipalidad, por el término anticipado de la concesión.
Entonces las licitaciones en esta materia requieren de buenas bases de licitación e inspectoría técnica o revisión permanente del proceso.
La situación actual es que el sistema de recolección de residuos domiciliarios está siendo administrado por el municipio, al cual se le acaba de inyectar todos los recursos que llegaron por el royalty minero, administración directa y mano de obra que se mantiene hasta el próximo 13 de junio.
El paso siguiente es que el alcalde vuelva a presentar una nueva licitación que supere los cuestionamientos o prorrogar la actual administración directa.