REGIONES.- Mientras el presidente de los regantes, Fernando Rueda acaba de declarar en la prensa regional que está disconforme con el manejo del proyecto embalse Nueva La Punilla por parte del MOP, el dirigente de Ñuble Libre califica el proyecto de “obsoleto” y con un diseño de los años 60.
En una entrevista telefónica para San Carlos Online, César Uribe, destacado dirigente del movimiento Ñuble Libre, compartió sus opiniones respecto al polémico proyecto del embalse La Punilla.
Uribe no titubea al expresar su descontento con el proyecto, describiéndolo como "obsoleto" y con un diseño que data de los años 60. Añade que la evaluación ambiental se remonta al 2006, con una resolución de calificación ambiental que ya debería haber vencido en 2015. Según cifras proporcionadas por Uribe, este proyecto afectaría a unas 7.100 hectáreas, aunque previamente se había estimado que serían 10.000 o incluso 20.000. Este cambio de cifras genera incertidumbre sobre quiénes serán los principales beneficiarios del agua. Según datos recopilados por el movimiento Ñuble Libre, se ha evidenciado que las principales favorecidas no son las 5.000 pequeñas unidades agrícolas, sino empresas transnacionales con intereses en la zona.
Impacto irreversible en las comunidades
El dirigente no escatima en críticas al señalar el daño irreversible que el proyecto ha causado en las comunidades de San Fabián y en los vecinos cordilleranos. Menciona la demora en las ayudas sociales y los proyectos de inversión en la zona, así como la destrucción del territorio, del río y del bosque. Estos impactos, según Uribe, representan un costo humano y ambiental que no puede pasarse por alto.
Apelación a soluciones alternativas
Aunque el movimiento Ñuble Libre no se opone a todos los embalses, rechaza aquellos que generan impacto negativo, como el caso del embalse de Punilla. En su lugar, apelan a construcciones fuera de línea y al uso eficiente del agua, con el objetivo de beneficiar principalmente a los pequeños agricultores de la región. Según Uribe, el embalse Coihueco es un ejemplo de cómo es posible realizar proyectos hidroeléctricos respetando el medio ambiente y las necesidades de las comunidades locales.
Desafíos y perspectivas futuras
La entrevista con César Uribe revela un panorama desafiante para el Proyecto Punilla y plantea interrogantes sobre su viabilidad a largo plazo. Las cifras y argumentos proporcionados por el dirigente del movimiento Ñuble Libre subrayan la necesidad de revisar detenidamente el impacto social, ambiental y económico de grandes obras de infraestructura como esta. Asimismo, resaltan la importancia de considerar alternativas sostenibles que prioricen el bienestar de las comunidades locales y el cuidado del medio ambiente.
Conclusiones y llamado a la acción
La voz del dirigente del movimiento Ñuble Libre resuena como un llamado a la reflexión sobre la importancia de considerar el impacto social y ambiental en la planificación de proyectos de esta envergadura. Sus palabras enfatizan la necesidad de buscar soluciones colaborativas y sostenibles que promuevan el desarrollo equitativo y respeten la integridad de los ecosistemas locales.
La entrevista con César Uribe ofrece una mirada crítica y fundamentada sobre el Proyecto Punilla, invitando a la comunidad a participar en un diálogo informado y constructivo sobre el futuro de la región.