El nuevo puente de calle Roble no ha inaugurado ni se ha abierto a la comunidad, sino que fue el público que al verlo prácticamente terminado decidió usarlo, aun cuando por otro lado hay dos denuncias a la Contraloría que cuestionan su construcción.
Uno de los cuestionamientos
más serveros es que se habría construido con planos de terceros no autorizados, algo así como un
robo intelectual y también está la denuncia
por construir sin tener las autorizaciones en su momento.
La construcción
del puente de calle Roble se inició el 15 de marzo de este año con una inversión
de $350 millones y considera la ejecución de un puente de hormigón armado. Y la Secretaría de Planificación Municipal (SECPLAN) detalló en su momento que, si
bien el proyecto data de años anteriores, faltaba información. «No existía el
nivel de detalles» requerido para ser aprobado.
En julio de 2021 el alcalde Suazo, que había aprobado los recursos y los estudios para construir, declaró: ”A mí los diseños de los puentes Roble y Carrera no me dan ninguna confianza” “En definitiva no puedo autorizar la licitación de puentes donde técnicamente, faltan muchos antecedentes”.
Con posterioridad
la situación entró en una nebulosa, a la
cual el Concejo Municipal se fue
acostumbrado y mientras sus consultas quedan solo en “preguntas sin resolver” el caso sigue sin respuestas y el Municipio no ha entregado todo este tiempo ninguna información
oficial.
Ha trascendido que la razón del por qué no hay una recepción de obras se debió a dos procesos investigativos que lleva adelate la Contraloría, originados en denuncias de terceros, y que dicen relación con los planos de la obra, algo así como robo de propiedad intelectual, y otra sobre el proceso de construcción donde se habría realizado obras sin las autorizaciones en tiempo y forma.