En comparación con el mismo período del año anterior
REGIONES.- Un total de 793 atenciones más que el año pasado, en igual semana epidemiológica, se han registrado durante los últimos días en la Red Asistencial; aumento originado por enfermedades como la influenza, adenovirus o virus sincicial, proyectándose un invierno más complejo que el anterior.
Las actuales cifras dan cuenta de la creciente presencia de diversos virus respiratorios, los que han generado un incremento en las consultas de urgencia en los distintos establecimientos de salud de la Red Asistencial, siendo esta un alza que se visualiza más rápido que el año anterior, en el mismo período.
Influenza, adenovirus, rinovirus, metaneumovirus, parainfluenza y virus sincicial, nuevamente son algunas de las principales infecciones que están afectando a la población, llevando a registrar un 62,8% más de atenciones por urgencias respiratoriasen comparación con la misma semana epidemiológica del 2022.
Según antecedentes proporcionados por el DEIS, hasta la semana epidemiológica 15 de este año, que va desde el 9 al 15 de abril, se han registrado 27.937 atenciones por urgencias respiratorias, es decir, 12.083 que a igual fuecha del año pasado,concentrándose, en la actualidad, un 33,8% de ellas en niños y niñas menores de 4 años.
Al respecto, el subdirector de Gestión Asistencial del SSÑ, Dr. Max Besser Valenzuela, precisó que “los principales sintomas en niños y niñas, cuando padecen algún cuadro respiratorio, son: congestión nasal, inapetencia, tos, estornudos, fiebre, silbido leve en el pecho, y en menores de un año, irritabilidad, menor actividad y dificultad para respirar. Si a estos se suman la respiración rápida, hundimiento de costillas, apertura de los orificios de la nariz y coloración azul en los labios, es fundamental consultar en el servicio de urgencia más cercano”.
El especialista además, reforzó el llamado al autocuidado y buen uso de la red asistencial, señalando que “las medidas preventivas para todos los virus respiratorios; son principalmente el lavado frecuente de manos, cubrirse la boca con el antebrazo al estornudar o toser, y la ventilación de espacios cerrados. A ello se suma completar los procesos de vacunación vigentes; fundamental para evitar cuadros de gravedad”.