Buscan resguardar materias primas de artesanos nacionales


AGRO.- Desde hace varias décadas que los artesanos está viendo amenazada la obtención de las materias primas para la realización de sus oficios tradicionales –siendo las fibras vegetales y las arcillas las más vulnerables.

El “Primer Seminario Nacional de Materias Primas para la Artesanía, Materialidades en Riesgo”, reunió la semana anterior en el Centro Montecarmelo a cultores, gestores, investigadores, docentes, y público interesado. 

Allí el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, acogió una solicitud del mundo artesanal nacional y se comprometió a trabajar, a través de INDAP, los servicios del agro pertinentes y los actores del sector, en planes de acción concretos para enfrentar esta problemática. La voz de los artesanos 

Durante la jornada se realizó un conversatorio de “voces artesanales”, donde los cultores Fédima Soto, cestera de Chaiguao, en la Región de Los Lagos; José Neihual, tallador en madera de Liquiñe, Región de Los Ríos, y Georgina Castillo, cestera en coirón de Hualqui, Región del Biobío, dieron a conocer sus experiencias de vida y las dificultades que tienen hoy para conseguir materias primas, debido a la actividad forestal, el mal manejo de los recursos y la destrucción de los humedales, entre otras razones.

Georgina Castilla contó que lleva más de 50 años trabajando en cestería, tiempo en el cual les ha ido enseñando a sus hijos y a una nuera, quien en su mejor heredera. “Hoy es difícil llegar a lugares donde podamos recolectar la materia prima, ya sea por los incendios o porque cortaron los árboles donde se hospedan las fibras que trabajamos, pero vamos a llegar adonde nos digan que hay, aunque sea muy lejos, porque no queremos que se pierda esta tradición”, relató.

Fédima Soto también dijo que debe ir lejos encontrar el conquillo para sus artesanías, porque “van quedando pocos humedales y lo que hay se lo comen los vacunos y las ovejas”, a lo que se suma todo el trabajo de secado y limpieza que requiere esta fibra vegetal.

José Neihual enfatizó que “los artesanos no somos una fábrica, ya que una pieza requiere de todo un proceso que va desde la recolección hasta las terminaciones, pasando por una mirada creativa”. En su caso dijo que debido a la falta de algunas maderas tradicionales ha debido experimentar con otras especies y rescatar troncos desde los ríos con tecla, bueyes y tractor.

Fuente: comunicado

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