LOCAL .- By Mario San Martin Mayo 11, 2019 En vez de potenciar el Liceo Agrícola de San Carlos, el municipio que recibió en administración este establecimiento, busca ahora insistir en que las autoridades educacionales le permitan desafectar (quitar) parte del terreno Agrícola
para dedicarlo a otro complejo deportivo, aun cuando recién el Gore de Ñuble aprobó M$ 962.946 millones para un polideportivo en el sector sur de la ciudad y cuya inversión total es cercana a los $2.500 millones .
En todos estos años la actual administración solo ha tenido ojos para ver la propiedad que allí existe (36 hectáreas) y ha propuesto desde construcciones habitacionales, hasta canchas de fútbol, aun cuando la finalidad de este establecimiento es formar Técnicos Agrícolas para una zona eminentemente productiva y que las autoridades la declaran como Agroalimentaria.
Los sancarlinos que se han quedado en silencio mientras el municipio insiste en otorgarnos el rótulo de comuna turística, desviando con ello la atención de lo verdaderamente nuestro, como es la actividad agrícola, principalmente.
Desde la Secplan se creó un plan que han denominado "proceso de solicitud de desafectación de terreno educacional a deportivo" y que busca precisamente que sean otras autoridades ajenas a la comuna, las que le otorguen el respaldo al sostenedor de la educación municipal para que este pueda quitarle 13 hectáreas al predio agrícola.
También se ha instruido a la directora del Daem para que gestione con el jefe de planificación e infraestructura de la seremi de Educación de la región del Biobío, Gastón Mella, dicho proceso de desafectación.
Lo más llamativo de todo, es que además se le ha pedido al DAEM que solicite al Liceo Agrícola, un informe sobre la cantidad de terreno que emplean o requieren para el funcionamiento del Liceo Agrícola, informe que deberán realizar un director subrogante y en general subordinados del sostenedor.
Cabe preguntarse por qué nunca antes durante estos nueve años, el sostenedor consultó cuanto terreno no se ocupaba y cuál era la razón de que no se trabajara en faenas agrícolas, demostrativas, de análisis etc.
Es obvio que el sostenedor tiene otros planes, diferentes a lo agrícola, para este establecimiento como ha quedado demostrado en la última reunión con una de la entidades de educación superior interesadas en desarrollar el establecimiento (instituto Sto. Tomás) y donde se planteó al sostenedor local que definiera qué quería hacer con el Liceo Agrícola.