LOCAL .- By Mario San Martin Abril 15, 2019 El concejo municipal que periódicamente aprueba nuevas patentes y traslados de locales de alcoholes, analizará en comisión este lunes una nueva solicitud patente situada en la controvertida ubicación de Variante San Agustín 668, la excasa del alcalde Gebrie que él, a nombre de su familia, arrendó para local comercial y que ha traído la rechazo de los vecinos.
Ese tipo de patentes son evaluadas por el concejo municipal y cuentan con informes de las Juntas de Vecinos, de Carabineros y de la Dirección de Obras, entre otros organismos. La semana anterior se vio el caso de una nueva patente Clase "C" en Balmaceda 349, en tanto que la comisión de alcoholes del concejo municipal deberá evaluar este lunes 15 otra patente, también clase C para la ubicación de Variante San Agustín 668.
Recordemos que originalmente los mismos comerciantes de esa dirección, habían solicitado una patente de "turismo" (que involucraría más de una clasificación), la cual le fue negada por el concejo municipal y rechazada por los vecinos, pero que hoy aparece solicitada por los mismos comerciantes y para el mismo lugar, pero como patente de restaurante diurno clase C, el que debe contar con informes favorables de: La Dirección Obras Municipales y de Carabineros, entre otros.
En San Carlos van 289 patentes de alcoholes que ha entregado la municipalidad. De este total 189 son limitadas y 6 corresponden a supermercados.
Según la norma los municipios pueden otorgar 1 patente de alcoholes por cada 600 habitantes lo que en San Carlos (53.000 hbts.) equivaldría a unas 88 patentes, o sea, estamos sobrepasados en 101 patentes, pero claramente el mayor problema está dado por el otorgamiento de patentes, cuyas actividades posteriores resultan distintas o más allá de lo que la ley permite.
El tema preocupante es que las patentes se clasifican por letras y cada letra permito o no distintas formas de comercialización y consumo, pero se da el caso que la patente más otorgada es la Clase "C" está siendo utilizada como si tuviese todas las clasificaciones y además de la venta y consumo de alcohol se dan las fiestas con música en vivo, karaokes y horarios prácticamente ilimitados, además de otra serie de excesos que terminan transgrediendo las normas y las leyes, y donde el rol fiscalizador se ve a veces sobrepasado.
En San Carlos estamos frente a un desorden en esta materia, ya que no se trata de negar patentes, sino de otorgarlas de acuerdo a la norma y legislación y, por sobretodo, ejercer la fiscalización que dé garantías al propio comerciante, al público consumidor y a los vecinos y comunidad.