Que el edificio del Centro Cultural de San Carlos en su diseño no tenga una boletería, es obvio, ya que se trata de un recinto
destinado a promover y desarrollar la Cultura y su rentabilidad es social y no económica.
Hace un tiempo se escuchó en el concejo municipal la idea de construir en la sala de ingreso un kiosco de madera que sirviera de boletería, lo que consignamos como una anécdota, sin embargo estamos cerca de ver materializada la idea de rentabilizar económicamente el edificio.
Circula entre los concejales, para su opinión y aprobación, un tarifado que valoriza los espacios y determina formas de arriendo. Es así como las salas se ofrecerán a particulares o productoras en arriendo por horas.
Lo que llama la atención es que también el municipio, con anuencia del concejo municipal ha empezado a cobrar y a generar eventos pagados, lo que obviamente se aleja del sentido original para lo cual el Ministerio de Cultura destinó millonaria inversión.
Si el municipio, dice la propuesta, realiza un espectáculo que tiene un costo de $700.000 a $900.000, la entrada se ha fijado en $3.000 lo que permitiría al municipio, con la capacidad de 255 butacas que tiene el anfiteatro, recaudar $765.000
Para usar el anfiteatro los colegios particulares subvencionados deberán pagar $40.000 en la mañana o $60.000 en la tarde, en tanto que las escuelas municipalizadas no pagarían. Si se trata de una productora de eventos (particular)paga $80.000 en la mañana y $100.000 en la tarde, en tanto que si es una OTEC (particular) paga $60.000 en la mañana y $80.000 en la tarde.
La diferencia que pretende hacer el municipio entre cobrarles a los colegios particulares subvencionados y no cobrar a los colegios municipalizados, resulta curioso, ya que el recinto fue construido para la comunidad de San Carlos, y en su propuesta el municipio consideró de su presupuesto los gastos de gestión y mantención.