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Subir de latitud y romper los prejuicios, los desafíos de la madera como material constructivo de viviendas.
En países como Canadá y Nueva Zelanda alrededor del 85% de las viviendas unifamiliares, entre uno a cuatro pisos son construcciones intensivas en madera; en Chile, según datos del INE, sólo el 12,4% de los muros son construidos en este noble material. En la zona central, su uso se limita principalmente a elementos estructurales y decorativos (pisos flotantes o vigas) o a la construcción de casas sociales.
A la madera se le acusa de ser poco durable, de tener poca resistencia estructural y mala aislación acústica, entre otras. Todas estas variables están resueltas con tecnologías existentes en nuestro país, con las cuales la madera puede alcanzar superioridad frente a la construcción en albañilería.
La durabilidad de una construcción depende fundamentalmente de dos aspectos: un diseño adecuado y el uso de productos que garanticen un adecuado desempeño. Nuestra recomendación va en ese sentido.
Para asegurar que la madera se vuelva inmune al ataque de agentes biodegradadores como las termitas y se reduzca en gran parte su combustibilidad se debe añadir algún tipo de producto químico o producir un proceso de cambio en su estructura, para esto se usa la impregnación.
En países como Canadá y Nueva Zelanda alrededor del 85% de las viviendas unifamiliares, entre uno a cuatro pisos son construcciones intensivas en madera; en Chile, según datos del INE, sólo el 12,4% de los muros son construidos en este noble material. En la zona central, su uso se limita principalmente a elementos estructurales y decorativos (pisos flotantes o vigas) o a la construcción de casas sociales.
A la madera se le acusa de ser poco durable, de tener poca resistencia estructural y mala aislación acústica, entre otras. Todas estas variables están resueltas con tecnologías existentes en nuestro país, con las cuales la madera puede alcanzar superioridad frente a la construcción en albañilería.
La durabilidad de una construcción depende fundamentalmente de dos aspectos: un diseño adecuado y el uso de productos que garanticen un adecuado desempeño. Nuestra recomendación va en ese sentido.
Para asegurar que la madera se vuelva inmune al ataque de agentes biodegradadores como las termitas y se reduzca en gran parte su combustibilidad se debe añadir algún tipo de producto químico o producir un proceso de cambio en su estructura, para esto se usa la impregnación.
Ventajas de la madera sobre la albañilería en la construcción de viviendasSismicidad: El comportamiento sísmico de una vivienda en madera tiene ventajas con respecto al de una en albañilería u hormigón, ya que es 4 a 5 veces más liviana. El peso específico de una albañilería es de aproximadamente 1.8 ton/m3 y el hormigón armado 2.5 ton/m3, mientras que en los sistemas modernos de construcción en madera es 0.5 ton/m3. El peso del material es crucial, ya que las fuerzas sísmicas son directamente proporcionales a él.
Economía: Las fundaciones de una construcción en madera son a lo menos 1/3 más económicas que las de la construcción tradicional, en razón al menor peso que deben soportar. Esta condición se acrecienta cuando los terrenos de fundación son de mala calidad (por ejemplo, arcilla expansiva).
La velocidad de construcción es otro factor que incide en el valor final. Su relación es de 1 a 3 veces el tiempo empleado con otro producto tradicional, considerando su construcción in situ (la vivienda industrializada tiene una relación de 1 a 6).
Energitérmica: La construcción en madera requiere de menos energía para la obtención de una temperatura confortable. El consumo de combustible es un 50% menor que el necesario para calefaccionar una vivienda de albañilería de ladrillo.
Aislación térmica: “Con respecto a la aislación térmica, la madera permite una solución constructiva tremendamente mejor que la albañilería de ladrillo. Con madera puedes llegar fácilmente a una transmitancia térmica de 0,5 o 0,6 W/m2°C o menos aún; con ladrillo se logra alrededor de 2 W/m2°C”.
Sustentabilidad: La madera es un material renovable, a diferencia de sus competidores, acero, hormigón, ladrillos, los que además requieren mayor energía para su obtención y refinamiento y son altamente contaminantes en dicho proceso.
Economía: Las fundaciones de una construcción en madera son a lo menos 1/3 más económicas que las de la construcción tradicional, en razón al menor peso que deben soportar. Esta condición se acrecienta cuando los terrenos de fundación son de mala calidad (por ejemplo, arcilla expansiva).
La velocidad de construcción es otro factor que incide en el valor final. Su relación es de 1 a 3 veces el tiempo empleado con otro producto tradicional, considerando su construcción in situ (la vivienda industrializada tiene una relación de 1 a 6).
Energitérmica: La construcción en madera requiere de menos energía para la obtención de una temperatura confortable. El consumo de combustible es un 50% menor que el necesario para calefaccionar una vivienda de albañilería de ladrillo.
Aislación térmica: “Con respecto a la aislación térmica, la madera permite una solución constructiva tremendamente mejor que la albañilería de ladrillo. Con madera puedes llegar fácilmente a una transmitancia térmica de 0,5 o 0,6 W/m2°C o menos aún; con ladrillo se logra alrededor de 2 W/m2°C”.
Sustentabilidad: La madera es un material renovable, a diferencia de sus competidores, acero, hormigón, ladrillos, los que además requieren mayor energía para su obtención y refinamiento y son altamente contaminantes en dicho proceso.
Por todas estas razones cuando quiera construir su vivienda transitoria y definitiva piénselo bien y comience a construir “de buena madera”.
Maderas “San Carlos” Camino Nahueltoro s/n km 1-fono: 415807 – 78535339 e-mail: maderasancarlos@gmail.com
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