Seguramente usted ha escuchado hablar de la crisis que están
viviendo las Isapres, incluso dicen en las noticias que están al borde de la
quiebra.
En Chile el sistema de seguridad social de salud, nos obliga
a todos los trabajadores a cotizar, por un 7% de nuestro sueldo imponible, ese
monto se entrega a las dos alternativas de
administran de las prestaciones de salud que tenemos: Uno es público, El
Fonasa, y el otro es privado y son las ISAPRES. Usted y yo, todos los
trabajadores podemos elegir a cuál de los dos sistemas le autorizamos a
administrar ese dinero.
Otra cosa distinta es donde nos atendemos, si yo soy Fonasa
no estoy obligada a atenderme solo en el servicio público, también puedo
hacerlo en el privado, por ejemplo puedo ir a una consulta médica particular o
a una clínica. Para quienes cotizan en
ISAPRE ocurre igual, también pueden atenderse en el sistema público. Claro
que, en cada caso nos cobran más por
usar el otro sistema.
Son diferentes los factores que hicieron que las Isapres se
encuentren en esta situación inesperada. Durante los últimos años, este negocio
tan consistente se encontró, simultáneamente, con algunos obstáculos para su
avance económico.
Uno es La tabla de factores: es el mecanismo utilizado por las Isapres
para determinar el costo de un plan de seguros de salud. Este determina en base
a las características del cliente, como edad, enfermedades preexistentes y
el sexo, analizando el «factor de riesgo» para el negocio. Por lógica, esto
limita el acceso a la salud del sector privado por cuestiones económicas.
El poder judicial ya había cuestionado esa fórmula por discriminatorio, pero
ahora, lo sancionó por cobros indebidos.
A los que están en isapre, les suben el valor del plan unilateralmente.
El año 2022 la Cortes Suprema ordena que se cobrara bajo una sola tabla a
partir del 2019 y se devuelva a todos los cotizantes el excedentes. Esto ya genenerá un déficit gigante en el
negocio de las Isapres.
Dicen que también la Pandemia afecto, puesto durante este tiempo tanto el
sistema público como privado, se vieron en la necesidad de colaborarse
mutuamente, por lo tanto, hubo mucha demanda del uso del sistema.
El uso de las Licencias médicas también provocó a un forado
en las ganancias de las isapres y durante la pandemia y post pandemia ha habido
un aumento de las complicaciones de la salud mental.
Como cualquier compañía de seguro, cuando este no se
usa, ahí es cuando la compañía gana, pero e estos últimos 4 años, las isapres
han debido pagar bastante a los prestadores de servicios de salud, que estos
son otros, Porque la Isapre puede ser dueña de la clínica o no, y si no es
dueña, tiene que pagar por las prestaciones que reciben sus afiliados. Este
tema es para largo, creo que podremos volver a reflexionarlo en los próximos
dias cuanto tengamos más noticias de cómo el gobierno enfrentará la problemática
que significa que el Quiebre de las Isapres.
Claudia Espina
Administradora Municipal