NACIONAL.- Luego de cuatro horas de viaje, la elefanta de más de 3,6 toneladas aterrizó en el aeropuerto vecino con un excelente estado de salud. Eso sí, ahora deberá enfrentar un lago viaje por tierra.
Una gran expectación surgió luego de que la elefanta Ramba -por años maltratada en un circo chileno- comenzaría una nueva vida en el Santuario de los Elefantes de Chapada dos Guimaraes en Cuibá, Brasil. Principalmente porque no se sabía si el animal soportaría o no el traslado en avión desde Santiago al aeropuerto Viracopos.
En total, cuatro horas de viaje debió enfrentar la elefanta de 3,6 toneladas de peso que ahora se deberá mover hasta el Mato Groso, donde se ubica la reserva que la recibirá. En el lugar, Ramba tendrá la compañía de dos ejemplares de su misma raza, Rana y Maia.
El ejemplar -que solo ha sido semi sedado con Flores de Bach- aún está a 30 horas por vía terrestre de su destino final. Debido a esto, el equipo de profesionales que la acompañan realizan continuos chequeos médicos para asegurar su óptimo estado de salud.