LOCAL .- By Mario San Martin Febrero 27, 2019 Diversas reacciones han surgido por parte de los dirigentes locales que, por primera asisten a una sesión del concejo municipal, debido a los "ásperos" diálogos de los ediles.
Este lunes unos 40 dirigentes asistieron a un "particular" llamado para analizar el caso de las subvenciones municipales, debido a que, al listado original de subvenciones ya entregadas por la alcaldía, las instituciones que no fueron beneficiadas por la decisión del alcalde, podrían "resolicitar" subvención municipal.
Lo curioso del caso es que los concejales, que no aprobaron el listado original de subvenciones, tampoco estaban al tanto de esta convocatoria y el tema tampoco estaba en tabla para hacer concurrir a los dirigentes.
Una de las dirigentes, Carolina Arias, presidenta de la agrupación de padres TGD (niños con dificultades del aprendizaje) hizo ver su malestar señalando que resultó espantoso "que hagan este tipo de encerronas a los concejales, ya que mientras ellos estaban contentos por la audiencia, nosotros no, ya que fuimos invitados a tratar el caso de la subvención municipal. pero tal tema no estaba considerado. Fue una burla.
En nuestro caso el dinero que pedimos, unos 400 mil pesos, es para mejorar el lugar donde nosotros realizamos rehabilitación para los niños".
Se trata de una treintena de padres que sus hijos padecen trastornos generalizado del desarrollo que involucra parálisis cerebral, espectro del autismo, y con mucho esfuerzo han logrado la colaboración de jóvenes profesionales que realizan talleres de rehabilitación a los menores y lograron que otra organización mediante un acuerdo, les proporcionara un lugar donde trabajar.
Pedían 400 mil pesos para poder limpiar y pintar la sede de los rehabilitados alcohólicos (otra organización que no pudo seguir funcionando) y que les fue facilitada para trabajar con sus hijos.
La agrupación TGD lleva en San Carlos cinco años luchando por ayudar a los niños que padecen distintas dolencias relacionadas con el desarrollo.
Su dirigente, Carolina Arias estuvo más de una hora y 30 minutos esperando que su caso se conociera, esperó y ante la consulta de otra dirigente, se enteraron que el caso de las subvenciones no sería abordado, lo que desató la crítica de los invitados, quienes en su mayoría optaron por retirarse de la sala municipal, defraudados.