Los ejemplares se habrían trasladado a Chillán desde la comuna de Curacaví, en la Región Metropolitana, producto de la trashumancia de colmenas que realizan los apicultores en épocas específicas del año.
La denuncia respecto a la aparición de las dos llacas fue recibida por personal SAG, quienes acudieron a su rescate y procedieron a trasladarlos al Centro de Rehabilitación y Rescate de la Universidad de Concepción, ubicado en Chillán, para determinar el estado en que se encontraban. Realizada la evaluación por personal de dicho centro, se estableció que estaban en perfectas condiciones para ser liberadas.
De acuerdo a las recomendaciones de los especialistas de la U. de Concepción, la liberación se debía realizar en la región del Maule, ya que de acuerdo a la distribución geográfica y hábitat era lo más indicado para la exitosa inserción de los ejemplares.

Al respecto, el Encargado de Recursos Naturales del SAG Región del Maule, Luis Villanueva, destacó “el trabajo conjunto realizado por parte de las oficinas SAG de Chillán y Linares, labor que fue realizada con el mayor profesionalismo y dedicación, contribuyendo a llevar a cabo la liberación exitosa de estos dos ejemplares en su medio natural, con el menos estrés posible y facilitando su reinserción en el medio ambiente”.