La joven María Quiñones
Sepúlveda, de 21 años, desaparecida cerca de las 16:00 horas del día de ayer
fue encontrada a eso de las 9:30 (horas) de hoy, cuando regresó caminando a su
hogar, culminando así más de 17 horas de búsqueda.
Eran las 4 de la tarde del martes
15 de julio, y comenzaban a correrse la voz del extravío de la joven en el
fundo Alico, de la comuna de Coihueco, frente a San Fabián, lugar donde la joven practicaba montañismo y,
por razones que aún no se aclaran, se perdió en la oscuridad de la noche.
Su familia y amigos cercanos
fueron los primeros en comenzar la búsqueda, aún con luz del sol, la
desesperación era tal que su padre siguió buscándola pese a la oscuridad y al inutilidad
de su linterna sin batería, lo que le costó una caída al resbalar junto con su
caballo en una quebrada, su cuerpo quedó ileso, pero su alma estaba acongojada.
El voluntario de bomberos, Pablo
Carrasco se unió a la búsqueda y telefónicamente informaba a San Carlos On Line, minuto a
minuto del extravío de la joven.
En esos momentos ya se habían
unido en su ayuda los voluntarios de la 4° Compañía de Bomberos de San Fabián
de Alico, además de montañistas y excursionistas que conocían a la joven o simplemente
colaboraron con la búsqueda. La lluvia nuevamente comenzó a caer durante la
noche, lo que complicó las tareas de las personas, que a esa hora ya eran
ayudadas por la 3° Compañía de Bomberos de Cachapoal y la 4° Compañía de
Chillán. La nieve comenzaba a caer, lo que obligó a suspender la búsqueda, la
muchacha llevaba 12 horas desaparecida, los voluntarios bajaron de los cerros y
se dirigieron a sus cuarteles para cambiarse de uniforme, mojado y embarrado
por el trabajo en la intemperie.
El sol comenzaba a alumbrar a eso
de las 6:30 de la madrugada de este miércoles 16, y, sin descanso, los
voluntarios siguieron con su labor, ahora se sumaba el GOPE de San Carlos,
todos en el fundo y en los cerros buscando a María.
Pasaron más de 17 horas, y con la
poca fuerza que le quedaba caminó hasta su casa, su familia con alegría la
abrazó, en tanto que algunos voluntarios que se encontraban en su hogar
comenzaban a comunicar la feliz noticia, María fue encontrada, la muchacha
llegó por sus propios medios a su hogar, luego del eufórico recibimiento se
desvaneció, el cansancio y el principio de hipotermia se abalanzaron con todo
en su cuerpo cuando se sintió segura. Los
voluntarios y otros que la buscaban comenzaban a descender mientras ella
era llevada al Consultorio de San Fabián, donde tras unas horas su estado de
salud mejoró y fue devuelta a su hogar, junto con su familia, que tuvo el feliz
desenlace que esperaban y del cual no perdieron la fe en ningún momento.