El énfasis está en producir en
forma intensiva en pequeños terrenos, con protección de raíces, fertirrigación
y entutorado.
En un día de campo realizado esta
semana, la Unidad Operativa de Hortalizas Ñuble, que reúne a 70 pequeños
productores de la provincia que reciben asesoría técnica de Indap, pudo mostrar
en terreno, los notorios avances tecnológicos que están efectuando los pequeños
productores para poder competir en mejor forma con los hortaliceros de más al
norte.
En la ocasión no solo se habló de
riego por goteo, que es una tecnología que hace 5 años no utilizaban los
pequeños productores y que ya es frecuente, sino de tecnologías como “mulch” o
acolchado de plástico; fertirriego que
entrega directamente el fertilizante a la planta y no al suelo; entutorado, que
permite un uso más eficiente del suelo y a que soporta más plantas por metro
cuadrado; y el uso de plantines de alta calidad, adquiridos en viveros de
prestigio que permiten rendimientos superiores.
Así lo comentó Alejandro Ponce
profesional de la Consultora Eloy San Martín, que es la que entrega la
asistencia técnica a estos pequeños agricultores de Indap, quien afirmó que el
desarrollo que está mostrando el grupo productivo es asombroso y que va en un
espiral de aplicación tecnológica.
“Una de las mejores formas de que
un agricultor acepte incorporar tecnología que desconoce, es viendo los
resultados que esta tiene en terreno. Eso es lo que hicimos en el día de campo,
mostramos con la experiencia de otros agricultores del mismo grupo que son más
innovadores, los resultados que dan en el campo estas tecnologías productivas
aplicadas”, señala Ponce.
La dinámica de la jornada de
trabajo consistió en mostrar primero un campo que tenía el efecto de “testigo”,
que consistía en un bien manejado cultivo tradicional, sin riego por goteo ni
mulch. El modelo que se hizo en el predio de Raúl Lagos en Oro Verde, consistió
en variedades de lechuga, acelga, tomate y col china.
Luego se pasó al predio de
Yolanda Montenegro, también el Oro Verde, donde se pudo apreciar la diferencia
que se logra al aplicar Mulch y sombreado, en algunas de las mismas variedades
del predio anterior. Finalmente se visitó el predio de los hermanos Guajardo
Medina en el Huape, que han adoptado toda la tecnología y que logran, por
ejemplo tener 17.750 plantas de tomate por hectárea (sin las técnicas lo
habitual es tener del orden de 10 mil).
En lo que respecta a
rendimientos, Alejandro Ponce asegura que con el uso de la tecnología señalada
casi se duplica y en sandías es más rentable aún, sobre todo si se ponen
plantas injertadas, cuyo patrón (la planta que recibe el injerto) es resistente
a plagas y permite obtener de 3 a cuatro sandías comerciales por cada planta,
cuando en la forma tradicional se logra solo una o dos.
El profesional señala que la
rápida incorporación de tecnología por parte de los pequeños hortaliceros,
obedece a que los resultados económicos, reditúan en el corto plazo, es decir a
la cosecha. Hay otras tecnologías, afirma, como los invernaderos que pueden
demorar dos años en producir resultados.
Respecto a los desafíos que se
vienen para este grupo de agricultores y sus asesores técnicos, está la
incorporación de micro y macro túneles de plástico, que hacen efecto
invernadero y que se utilizan para acortar la brecha que se tiene con los
productores de más al norte.
Otro tema pendiente, afirma el
asesor técnico, es el de la mecanización, que resulta difícil de abordar debido
a los altos costos de la maquinaria como pequeños tractores, u otras
relacionadas a siembra, manejo y cosecha. “Como el resto de la agricultura uno
de los problemas del rubro es el de mano de obra. Parte de la tecnología que
estamos incorporando también apunta hacia ese aspecto, facilitar las labores,
las aplicaciones de pesticidas y fertilizantes”.
Otro tema pendiente es el de la
certificación de calidad, para lo cual se está trabajando para crear una
instancia a nivel de la pequeña agricultura que cumpla este objetivo.
Consultado si en el aspecto de
mecanización se ha intentado hacer un trabajo de asociatividad, dada la
concentración de gran parte de los hortaliceros en zonas cercanas, por ejemplo
para adquirir tractores, Ponce señala que la organización es un tema que durante esta administración ha
tenido poco tiraje y que a su juicio se hace necesaria, agrega que espera que
el tema sea abarcado por el gobierno entrante.
Reconoce en todo caso el trabajo
del seremi de Agricultura, José Manuel Rebolledo, y el Indap: “Esto ha
permitido que estemos con tres pequeños productores incorporándose a un
programa de Alianzas Productivas, con Cencosud, lo que permitirá que sean abastecedores
directos de los supermercados, lo que les significa rentabilizar mejor su
producción sin tener que pasar por intermediarios”, apuntó.
Fuente: ladiscusion.cl