Tras la grave denuncia de nuevas inundaciones en el interior edificio del Centro de Cultura, que aún no ha sido entregado por la constructora, el Alcalde Gebrie volvió a reaccionar negando tales afirmaciones y señalando que el agua que había en las cámaras no había sido retirada por falta de funcionamiento del sistema de evacuación.
En tres ocasiones el ITO, Inspector Técnico de la Obra, arquitecto Martin Cid ha solicitado que se vacíe la laguna, ya que, según sus apreciaciones, hay filtraciones subterráneas que afectan al edificio.
Por su parte el Alcalde Hugo Gebrie que ha convenido con la empresa ingresar antes del término de las obras, discrepa absolutamente con el criterio técnico del ITO y niega rotundamente que las filtraciones provengan del espejo de agua municipal que está a escaso 10 metros del lugar. Además el Alcalde ha pedido a la empresa que ejecute obras adicionales, relacionadas con la evacuación de aguas lluvias que, según él, no estaban siendo realizadas por la constructora.
El lunes , tras conocerse ese informe, el Alcalde que el día anterior había inaugurado con un show, el llenado de la laguna, sitio recordado y apreciado por la comunidad, citó a primera hora al Director de Obras, Gastón Suazo, al Secplan, Alex Molina y en presencia del representante de la constructora (Javier Oviedo) discutieron la situación.
Cabe señalar que el autor de los tres categóricos informes, el inspector técnico de la obra, Arquitecto Martin Cid, no fue convocado por el Alcalde.
Lo curioso es que el acta de acuerdo estuvo centrada en que la empresa debía comunicar al Alcalde y al DOM “cualquier decisión que se produzca en relación a la obra”.
El acta también consigna que la empresa está ejecutando obras (lo que es obvio) y agrega, en relación a lo denunciado: “Se verifica que la acumulación de aguas que saturaron las cámaras de inspección del alcantarillado se vaciaron de forma inmediata, al hacer funcionar la planta elevadora de aguas servidas (PEAS).
Si bien está comprobado que han existido filtraciones en el interior del edificio, esta larga discusión municipal podría haber terminado si se cumple la solicitud de las autoridades de Cultura que piden un informe y propuesta definitiva sobre las filtraciones, cuyo costo resulta insignificante si se considera el valor del edificio, su implementación y, fundamentalmente su fin.
Las autoridades gubernamentales de Cultura, han dicho anticipadamente que el municipio deberá contratar los servicios profesionales externos que analicen y establezcan las causas de las filtraciones y eventualmente propongan medidas correctivas definitivas para evitar que esto vuelva a ocurrir, resguardando así el edificio, cuya inversión supera los 800 millones de pesos.
Otro aspecto importante a considerar es que, si bien la planta elevadora de aguas servidas ha evacuado aguas no servidas, se estaría cometiendo una irregularidad sancionable.
La comunidad observa con inquietud cómo esta discusión se mantiene por largo tiempo y se prolongará hasta la próxima semana cuando, la Dirección de Obras Municipales proponga al Alcalde, los miembros de la comisión que deberá resolver la recepción definitiva de esta obra y donde se considera además la participación de un representa del Consejo nacional de la Cultura y las Artes.
En tres ocasiones el ITO, Inspector Técnico de la Obra, arquitecto Martin Cid ha solicitado que se vacíe la laguna, ya que, según sus apreciaciones, hay filtraciones subterráneas que afectan al edificio.
Por su parte el Alcalde Hugo Gebrie que ha convenido con la empresa ingresar antes del término de las obras, discrepa absolutamente con el criterio técnico del ITO y niega rotundamente que las filtraciones provengan del espejo de agua municipal que está a escaso 10 metros del lugar. Además el Alcalde ha pedido a la empresa que ejecute obras adicionales, relacionadas con la evacuación de aguas lluvias que, según él, no estaban siendo realizadas por la constructora.
El lunes , tras conocerse ese informe, el Alcalde que el día anterior había inaugurado con un show, el llenado de la laguna, sitio recordado y apreciado por la comunidad, citó a primera hora al Director de Obras, Gastón Suazo, al Secplan, Alex Molina y en presencia del representante de la constructora (Javier Oviedo) discutieron la situación.
Cabe señalar que el autor de los tres categóricos informes, el inspector técnico de la obra, Arquitecto Martin Cid, no fue convocado por el Alcalde.
Lo curioso es que el acta de acuerdo estuvo centrada en que la empresa debía comunicar al Alcalde y al DOM “cualquier decisión que se produzca en relación a la obra”.
El acta también consigna que la empresa está ejecutando obras (lo que es obvio) y agrega, en relación a lo denunciado: “Se verifica que la acumulación de aguas que saturaron las cámaras de inspección del alcantarillado se vaciaron de forma inmediata, al hacer funcionar la planta elevadora de aguas servidas (PEAS).
Si bien está comprobado que han existido filtraciones en el interior del edificio, esta larga discusión municipal podría haber terminado si se cumple la solicitud de las autoridades de Cultura que piden un informe y propuesta definitiva sobre las filtraciones, cuyo costo resulta insignificante si se considera el valor del edificio, su implementación y, fundamentalmente su fin.
Las autoridades gubernamentales de Cultura, han dicho anticipadamente que el municipio deberá contratar los servicios profesionales externos que analicen y establezcan las causas de las filtraciones y eventualmente propongan medidas correctivas definitivas para evitar que esto vuelva a ocurrir, resguardando así el edificio, cuya inversión supera los 800 millones de pesos.
Otro aspecto importante a considerar es que, si bien la planta elevadora de aguas servidas ha evacuado aguas no servidas, se estaría cometiendo una irregularidad sancionable.
La comunidad observa con inquietud cómo esta discusión se mantiene por largo tiempo y se prolongará hasta la próxima semana cuando, la Dirección de Obras Municipales proponga al Alcalde, los miembros de la comisión que deberá resolver la recepción definitiva de esta obra y donde se considera además la participación de un representa del Consejo nacional de la Cultura y las Artes.