Con un patrimonio superior a los 15 millones de dólares y una alta votación en la VIII Región, el senador DC nuevamente hizo gala de su autonomía a la hora de votar. Tímido, pero bueno para reírse, es en general austero, aunque tiene una marcada debilidad por los autos, su gran lujo. Es un patrón de fundo de verdad, pero sin arrogancia, dicen.
Empresario, senador, contador, patriarca, DC y ex colorín. Son sólo algunos epítetos que definen las múltiples facetas del senador Hosaín Sabag, quien este año, más que nunca en sus 48 años de militante de la flecha roja, ha estado en “EL” centro de las críticas de sus camaradas.
El apoyo al discutido proyecto del gobierno para financiar la reconstrucción causada por el terremoto de febrero, la aprobación del sueldo mínimo en 172 mil pesos y ahora el rechazo a la indicación concertacionista para excluir de la Ley Antiterrorista el delito de incendio contra la propiedad privada en caso que no hubiera muerte, lesiones graves o daños significativos, han sido tensos capítulos para este parlamentario de la VIII Región Norte, porque con su voto favorable al gobierno hizo tambalear la frágil mayoría de la oposición en la Cámara Alta.