SAN CARLOS.- (Mario San Martín Aliaga-Samuel Muñoz Orellana) Esta tarde se efectuó el funeral del joven ingeniero que falleciera trágicamente durante el fin de semana.Tras la misa oficiada por el sacerdote Rodrigo Uribe, el féretro seguido de una larga fila de vehículos se dirigió al camposanto local, donde esperaba una numerosa concurrencia.
Allí y a nombre de los profesionales de la educación, despidió sus restos mortales el director de educación Ricardo González quien al referirse al joven profesional, Víctor Andrés Fuentes Aravena(28), dijo: “Me es muy difícil pronunciar estas palabras, para despedir a este joven profesional y entregar mis sentidas condolencias y las de todo el Departamento de Educación de la Municipalidad, a su querida familia, esposa e hijos, padres, hermanos y suegrosEstuviste muy poco entre nosotros, pero supiste ganarte nuestro aprecio y reconocimiento, nos sentimos orgullosos y honrados de haber compartido contigo, te desempeñaste como jefe administrativo y poco apoco asumiste otras responsabilidades, que llenabas todo tu tiempo. Para ti no existían los horarios, siempre dabas más para cumplir, con lo que se te había encomendado, nada fue impedimento para ir asimilando y solucionando las tareas y proyectos que se estaban desarrollando, me siento agradecido el haber trabajado a tu lado, interpreto plenamente el sentir de nuestros compañeros”
Al concluir emocionado el Director de DAEM expresó: “Me siento agradecido el haberte tenido como un amigo, compañero y colaborador, tu simpatía, era imperecedera, tu alegría y compañerismo nunca lo olvidaremos, innumerables eran tus virtudes, pero no puedo omitir tu transparencia, sinceridad y respeto que nos brindaste, tu recuerdo nos acompañara por siempre, Víctor”.
La masiva concurrencia de la comunidad a este funeral fue una demostración de afecto a la familia por la repentina perdida de este joven ingeniero, que pese haber trabajo un corto periodo en el sistema de educación, se caracterizó por su profesionalismo y por sobreponer la transparencia y respeto en su labor.
Le sobreviven su joven esposa, María de los Ángeles Uribe, su hijo Alfonso y un hijo que está por nacer en los próximos días.